Madrid descubre hoy una placa en memoria de Prim asesinado hace 142 años

El general Juan Prim y Prats, asesinado un día como hoy de hace 142 años cuando era presidente del Gobierno, tendrá desde hoy una placa de homenaje en la calle del Turco de Madrid, la actual Marques de Cubas, junto al Congreso, en el mismo lugar en el que sufrió el misterioso atentado que le costó la vida.

“No olvidéis la sangre derramada por nuestras discordias políticas” reza la placa conmemorativa, obra del escultor catalán Ramón Ferrán, y que será inaugurada en un acto institucional que contará con la asistencia del presidente del Congreso, Jesús Posada y la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, entre otras personalidades.

La frase está sacada de uno de los discursos parlamentarios del general, que murió asesinado unos días antes de que llegara a España el rey Amadeo I, del que había sido su principal valedor y que apenas se mantuvo en el trono poco más de dos años.

El último recorrido que hizo aquel día desde el Congreso de los Diputados hasta su residencia en el Palacio de Buenavista, en la cercana plaza de Cibeles, será el hilo conductor del homenaje de hoy, que forma parte de los actos del bicentenario de su nacimiento, que se conmemora en 2014.

La primera cita será en el Congreso de los Diputados donde se presentará un libro sobre los discursos parlamentarios del general.

Desde allí, una comitiva institucional partirá a pie hacia la calle del Turco, junto al Banco de España, donde se descubrirá la placa de homenaje.

La comitiva institucional terminará en el Palacio de Buenavista, residencia del entonces presidente del Gobierno y actual Cuartel General del Ejército.

Un halo de misterio ha rodeado siempre la muerte de Prim desde aquella gélida tarde de 1870 cuando en una emboscada, un grupo de desconocidos acribilló el coche de caballos que lo trasladaba desde el Congreso hasta el Palacio de Buenavista.

Las contradicciones del relato histórico son tales que incluso hay discrepancias sobre el día de su muerte o las verdaderas causas del deceso.

Mientras unas fuentes aseguran que Prim falleció ese mismo día a causa de los disparos, otras mantienen que murió tres días después, el 30 de diciembre, a causa de una septicemia provocada por una mala praxis médica.

También se duda sobre si murió a consecuencia de las heridas de bala o estrangulado días más tarde cuando se encontraba en cama recuperándose de las heridas.

Para arrojar luz a este misterio, un equipo forense analizó el pasado mes de septiembre el cadáver de Prim, que fue embalsamado en su día y se encuentra en bastante buen estado de conservación.