Tecnología e investigación para facilitar la vida al celíaco

La celiaquía, además de un problema de salud, se ha convertido en una enfermedad para el bolsillo. Podemos hacer esta afirmación tras observar los datos que ofrece la Federación de Asociaciones de Celíacos de España (FACE). La cesta de la compra de una familia con al menos un celíaco entre sus miembros se encarece un 288,56 % con respecto a la de una familia sin ningún celíaco. O lo que es lo mismo, 1.500 euros más en un año.

Cada 27 de mayo se celebra el Día Nacional de la Celiaquía, intolerancia caracterizada por la inflamación en la mucosa del intestino delgado que dificulta la absorción de nutrientes. Afecta a alrededor de medio millón de españoles, pero solo el 10 % está diagnosticado.

Cada vez son más los productos libres de gluten que se ofrecen. Pero hacer la compra no es tan fácil como parece. Productos que, a priori, podrían ser consumidos por los celíacos, pueden llevar gluten en los conservantes que se les añaden. Ante esta situación, una afectada impulsó la creación de una aplicación móvil que detecta los productos aptos para celíacos en el supermercado.

La agricultura sostenible es una pieza importante para mejorar la calidad de vida de los celíacos. Para ello, científicos andaluces han puesto el ojo en el cultivo de trigo, cereal que más gluten contiene, y han desarrollado una variedad libre de este compuesto. Una investigación que ha llamado la atención de una multinacional estadounidense con intención de comercializar el producto.

El emprendimiento también ha ayudado a abrir un poco más el abanico de posibilidades en la alimentación de los celíacos. Dos jóvenes han patentado la primera masa de repostería 100% libre de alérgenos. Porque no solo beneficia a los intolerantes al gluten, sino que también es apta para aquellos que no pueden comer lactosa, soja o huevo, por ejemplo. Alergias e intolerancias que, a veces, pueden combinarse. Ya se comercializa por toda España y en algunos sitios del extranjero.