Pregunta. Usted acaba de venir del Reino Unido. ¿Le ha dado la impresión de que había muchos rumanos?
Respuesta. Pues... no.
P. ¿Y búlgaros?
R. Tampoco... ¿Por qué me lo pregunta?
P. Se lo pregunto porque desde el pasado 1 de enero los rumanos y los búlgaros ya pueden circular libremente por todos los países de la Unión Europea. Aunque Rumanía y Bulgaria pertenecen a la Unión Europea desde 2007, hasta hoy sus ciudadanos no podían circular libremente por el Reino Unido. Ni por el Reino Unido, ni por Holanda, ni por Austria ni por Alemania, ni por Bélgica, ni por Francia, ni por Luxemburgo, ni por Malta.
R. Me lo pregunta usted como si yo tuviera la culpa. Me avergüenza que se acepte con tanta naturalidad ese tipo de restricciones. España, Grecia y Portugal también fueron sometidas a la misma cuarentena cuando se integraron. Quizás por eso ninguna de ellas está dentro de ese ignominioso grupito. España no ha secundado las indecentes maniobras del Reino Unido para prolongar la moratoria de rumanos y búlgaros.
P. ¿No le parece que la política de inmigración española se diferencia muy poco de la que aplica ese ignominioso grupito, como usted lo llama? Aquí sellamos las fronteras con cuchillas concertinas y los médicos no pueden atender a los inmigrantes sin papeles. Aquí acaba de morir un hombre en el Centro de Internamiento de Extranjero de la zona Franca de Barcelonaignominioso grupitoacaba de morir un hombre en el Centro de Internamiento de Extranjero de la zona Franca de Barcelona.
R. Lo único que le digo es que me alegro —y toco madera— de que España no se haya contagiado de la corriente de mierda xenófoba que recorre el centro de Europa, echando la culpa de la crisis a sus principales víctimas.
P ¿Sabe lo que dice Cameron para limitar el acceso de los inmigrantes a los servicios públicos?
R. No.
R. Que la seguridad social no puede absorber semejante avalancha de extranjeros. Pero No hay tal avalancha de inmigrantes. Sólo el 2,6% de todos los ciudadanos europeos se mueve por Europa en busca de trabajo. ¿Merece la pena pertenecer a esta Europa, a una Europa que expulsa a los europeos de Europa?
R. Europa no es solamente el Reino Unido ni ese grupo de países que querrían prolongar la limitación de entrada de rumanos y búlgaros. Europa es también Polonia, Hungría, República Checa y Eslovaquia, países que han enviado una carta a sus colegas europeos recordándoles que la riqueza generada por estos europeos de segunda categoría es superior al gasto que puedan provocar. Europa es también la Comisión, las instituciones comunitarias, Bruselas, que ha resistido el pulso del Reino Unido y que ha impuesto el final las restricciones. Sin ese freno, Cameron y los demás hace tiempo que se habrían liado la manta a la cabeza. La Unión Europea es el único antídoto contra las pulsiones fascistas de este puñado de gobernantes ambiciosos y mediocres.
P. Fascismo, fascismo... ¿No le parece que el fascismo se ha convertido en el hombre del saco, en una amenaza terrorífica para los niños malos que no quieran aceptar el liberalismo económico de la UE?
R. No querría comprobarlo.
Pregunta: ¿Por qué autoentrevistas?
Respuesta: Porque al fin y al cabo todas las columnas de opinión son respuestas a unas preguntas que se han borrado.
P: Hable por usted, no por los demás.
R: Bueno, no sé si todas. Las mías sí. Cuando tengo que escribir una columna me hago preguntas, las contesto y luego borro la parte del entrevistador.
P: Y aquí ha decidido dejarla.
R: Sí, para darle voz a mi otro yo.
P: ¿Y no es un poco esquizofrénico eso de hacerse preguntas, contestarlas y llevarse la contraria?
R: Un poco, pero es la única manera que tengo de saber lo que pienso sobre las cosas. Y además no siempre estoy de acuerdo con mis opiniones.
