Periodista y profesora, por este orden. He pasado de la Olivetti al Mac sin inmutarme. Un día cogí un tren a Madrid y me volví a Valencia con el sumario secreto del caso Gürtel. Después, me metí en otras guerras de moqueta azul, aquí y en Bruselas. Orgullosa ciudadana europea hasta que nos rompan el juguete. Soy la vecina del quinto en las redes. Denme un hilo y les traeré la cabeza del malo. Hoy se llama periodismo de investigación.