Primeras reacciones de Iñurrategi, Vallejo y Zabalza tras alcanzar la cumbre de la Torre (6.050 metros) en la pared Sur del Paiju Peak
Desde su Campo Base al pie de la cara Sur del Paiju Peak, Alberto Iñurrategi, Juan Vallejo y Mikel Zabalza nos envían las primeras imágenes en las que se aprecia el último tramo de ascensión y la consecución de la cima de la torre de 6.050 metros, que se ha conseguido por vez primera, en lo que ha sido calificado como “una de las aperturas himaláyicas más sobresalientes que ha conocido este país”.
Pese a todas las dificultades, la expedición WOPeak ha conquistado el pilar central y más vertiginoso de la imponente cara sur del Paiju Peak, tras diez agotadoras jornadas de hasta 12 horas de esfuerzo pegados a esta pared, en lo que los tres integrantes de la cordada han calificado como la vía más dura que han emprendido hasta la fecha. De la peligrosidad de esta escalada da buena prueba el hecho de que uno de los integrantes de la expedición, el alavés Juan Vallejo, tuvo que renunciar a los últimos metros a cumbre debido a un fuerte golpe en un brazo por el desprendimiento de un bloque de granito.
La expedición ha afrontado dificultades en escalada artificial de hasta 3, en libre hasta 6b y en mixto hasta m5. Esta torre tiene la particularidad de tener un componente muy alpino, por su acceso, por su final y por los peligros continuos. Longitud, dificultad y componente alpino, con largos de arista muy comprometidos, han convertido este ascenso en un auténtico hito.
Una barrera de seracs de la que caen continuamente trozos de hielo les ha impedido el acceso a la cumbre del Paiju Peak (6.610 m.) desde esa vertiente, que hubiera representado casi un suicidio después de diez jornadas de escalada al límite.
