Miguel Ángel Ramírez, campeón de la Copa Sudamericana: “Para superar barreras, tenía que salir de Gran Canaria”
El reciente éxito internacional del Independiente del Valle, tras proclamarse campeón de la Conmebol 2019, puede suponer el espaldarazo del fútbol en Ecuador y convertir a este país en una potencia de Sudamérica, según ha explicado este martes su entrenador, el español Miguel Ángel Ramírez, en su Gran Canaria natal, donde ha analizado el título conquistado.
Un club modesto, con apenas diez años de historia y mucho menor seguimiento que otras instituciones históricas del país, alcanzó la gloria en la Copa Sudamericana tras vencer el pasado mes de noviembre en Paraguay al Colón argentino (3-1).
Atrás había dejado en el camino a clubes de gran jerarquía, como el Corinthians brasileño, al que superó en semifinales por un global de 4-2.
Ramírez ha subrayado en su comparecencia ante los medios de comunicación que en Ecuador hay “más talento que hábito”, y que para sacar futbolistas es imprescindible contar con instalaciones adecuadas, un buen proceso de captación y entrenadores preparados para formar, pilares por los que en su día apostó el Independiente del Valle, y ahora ha empezado a recoger los frutos.
“Nuestro club es la referencia de captación de jugadores en todo el país, la estructura creada es muy potente. Hay 120 chicos de todo Ecuador en la Ciudad Deportiva, donde viven, comen y estudian, con unas instalaciones de primer nivel mundial”, ha relatado Ramírez.
A su juicio, el objetivo principal del club es “desarrollar el talento, que lo hay y mucho. Los jugadores necesitan una oportunidad y ponerlos en escena, como hemos hecho, para surtir de futbolistas a la selección absoluta y que Ecuador sea una potencia mundial”, ha asegurado.
Ramírez considera que esa firma apuesta por el fútbol formativo “ya está siendo una realidad”, pues las selecciones ecuatorianas sub'17 y sub'20 cuentan en su mayoría con jugadores educados en el Independiente del Valle.
El técnico canario llegó al banquillo del equipo rayado “sin esperarlo ni buscarlo”, en mayo de 2019, tras la salida del también español Ismael Rescalvo, y cuando trabajaba en lo que más le gusta, como máximo responsable del fútbol formativo del club ecuatoriano, al que se incorporó tras seis años de experiencia en Catar y un breve paso por el Deportivo Alavés, en Vitoria (España).
En el estado árabe, Ramírez trabajó para la Aspire Academy, donde fue seleccionador asistente de la selección catarí sub'19 y seleccionador principal sub'14.
“Para progresar y superar barreras tenía que salir de Gran Canaria, a formarme y experimentar. Tenía que ser valiente y despegarme de la comodidad. Aquí hay una competición muy endogámica. Tenía muy claro lo que quería conseguir, y aquí no lo iba a lograr”, ha subrayado el preparador español.
Ramírez ha explicado que en su equipo hay una perfecta combinación de veteranía y juventud, y apuesta por el talento del futbolista ecuatoriano, si bien precisa que debe “completar su proceso de formación” antes de dar el salto definitivo a Europa.
“La idea es que cuando el jugador salga del país, lo haga para no volver”; en definitiva, para triunfar en otro continente. Y advierte: “Vienen generaciones muy buenas de jugadores; son rápidos, fuertes físicamente y técnicamente aceptables”.
Además, cree que la distancia futbolística entre Europa y Sudamérica está siendo “cada vez mayor”, y siente que los rivales a los que se han enfrentado “se están estancando, no terminan de evolucionar, y hemos tenido un funcionamiento colectivo superior a los demás, hemos ido por delante de todos en juego”.
Como entrenador, Ramírez tiene como referentes de modelo de juego a los españoles Pep Guardiola y Quique Setién o al argentino Gaby Milito. Le gusta “presionar alto y forzar el error del rival, no esperarlo”, porque ve el fútbol como un reto para encontrar los “espacios” que generen la posibilidad de llegar al gol.
El joven técnico isleño, de 35 años, también se siente orgulloso de haber contribuido que el éxito del Independiente del Valle haya servido como “excusa” para unir a Ecuador en un momento de reciente crisis social y política.
“Hay un grupo estupendo de jugadores, profesionales, respetuosos y muy alegres. Hemos dado la oportunidad a muchos chicos de tener una vida mejor”, enfatiza.
Ramírez recuerda que a su llegada, y la búsqueda de jugadores, recorrió todo el país, incluso por zonas selváticas o campos de tierra “donde los niños juegan sin zapatos”, lo que ha hecho la experiencia “más profunda y auténtica”.
“Se vienen cosas muy bonitas”, ha asegurado Ramírez, como la posibilidad de jugar la Recopa Sudamericana 2020 frente al Flamengo brasileño, ganador de la Copa Libertadores, o la participación en el próximo Mundial de Clubes; todo ello, gracias al título conquistado en Asunción (Paraguay) por el Independiente del Valle, el segundo que consigue un club ecuatoriano a nivel internacional.
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23 años de cárcel
En Canarias Ahora podemos atestiguar que el Lawfare existe. Lo vivimos de cerca entre 2015 y 2022 cuando informamos con todo detalle de cómo el exministro José Manuel Soria (PP) y el exjuez Salvador Alba conspiraron para acabar con la carrera política y profesional de la magistrada Victoria Rosell (Podemos). Y lo volvemos a vivir ahora con el intento de Alba de vengarse en la persona del director de nuestro periódico, Carlos Sosa, tras haber sido descubierto, juzgado y condenado a los tres delitos más graves que puede cometer un juez (cohecho, prevaricación y falsedad en documento judicial) a seis años y medio de prisión y 18 de inhabilitación.
Con la ayuda de una jueza de Madrid que ha desoído incluso al Ministerio Fiscal, Alba ha conseguido que Carlos Sosa se siente en el banquillo para responder a una petición de 23 años de prisión y a una indemnización de 422.500 euros simplemente por haber informado con todo rigor de sus delitos y de sus trapisondas para eludir la acción de la justicia.
Ahora bien, el preparador español considera que será “fundamental” para el futuro del fútbol nacional la elección del nuevo seleccionador absoluto de Ecuador, para terminar de situar al país en el “top 3” sudamericano.
El entrenador del Independiente del Valle tiene contrato en vigor hasta 2021 y su intención es continuar en un club donde se siente “a gusto”, sin prisa por salir, pero sin descartar que un futuro a medio o largo plazo pueda emprender otro proyecto, con el único condicionante de que le sirva para “crecer y mejorar”.
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