Los huertos ecológicos emplean a 20 personas

Diana Mendoza / Diana Mendoza

“Mira qué berenjenas más brillantes” señala Beningno Sánchez, que trabaja en los terrenos de La Banda, mientras se sube al camión que lleva la carga que se repartirá a las veinte tiendas del grupo en toda la isla de Gran Canaria. “Llevo veinticinco años trabajando en la agricultura, es un sector muy castigado y no hay muchas oportunidades como ésta para poder seguir trabajando en la tierra”, comenta este agricultor mientras señala las cajas con la cosecha recolectada de puerros, judías tiernas, calabacines, tomates y calabazas.

Veinte desempleados de alrededor de 40 años de la zona del sureste de Gran Canaria han conseguido empleo en los huertos ecológicos que suministran sus productos al grupo empresarial Hermet Alimentación y a su restaurante en el centro de la capital grancanaria. “Quiero buscar los mejores productos para mis tiendas y Canarias es capaz de producir todo, no hay necesidad de importar” afirma con rotundidad Joaquín Hernández, propietario de esta cadena de alimentación.

Desde el pasado mes de enero este “emprendedor de Tenteniguada”, como se define él mismo, decidió arrendar por diez años 6 fanegadas, 33.000 metros cuadrados de terreno, en El Burrero y La Banda, en el municipio de Ingenio, con la idea de dar trabajo a desempleados de la zona con pocas posibilidades de obtener una oportunidad laboral en estos tiempos de crisis.

Joaquín Hernández no pidió un plan de viabilidad cuando el pasado enero decidió emprender esta aventura empresarial. “Esto no me da dinero por ahora, lo hago porque soy un enamorado de la tierra y porque sé lo que estoy dando al consumidor en mis tiendas, estos productos tienen kilómetro cero”, explica Hernández, que aspira a que por lo menos esta iniciativa no le dé perdidas económicas y pueda llegar a un 50% de producción propia y un 50% de importación de productos a otros productores locales.

De los terrenos que tiene en La Banda han salido recientemente 100.000 kilos de sandía, 200 toneladas de tomates y 100 de calabazas. “Rotamos los cultivos para que la tierra no se vicie, ahora plantaremos coles dónde antes estaban las sandías, no utilizamos para ello productos químicos, ni sulfatos, ni pesticidas, el ganado come y a su vez abona los terrenos, hacemos un circuito cerrado con el forraje dónde todo se aprovecha”.

Paulino Rivero ha declarado en varias ocasiones que el Archipiélago debe volver a apostar por el sector primario, un sector al que nunca tuvo que dar la espalda, según el presidente del Gobierno de Canarias. Hernández se muestra crítico con estas declaraciones porque cree que “no hay propósitos reales por parte de los políticos de apoyar al sector primario, si realmente quieren hacerlo tienen que tomar medidas concretas como la reducción de la hora de agua, la puesta en funcionamiento de las desalinizadoras, muchas de ellas inoperativas, y la reducción de la seguridad social para que podamos contratar mano de obra”.

Para Hernández, que cuenta en sus terrenos con más de un centenar de cabezas de ganado, también son importantes los animales, “nos tenemos que dedicar a criar pollos, corderos, etc. y así no tendríamos necesidad de importar tanta carne como lo hacemos en Canarias que traemos de Nueva Zelanda, de Chile o de Brasil”. Este enamorado de la tierra sostiene que no aprovechamos lo que tenemos “en Canarias disponemos de una de las mejores carnes del mundo, la carne de cordero de pedibuey, el auténtico Kobe canario, y ni siquiera echamos cuenta de ello”.

En el restaurante que tiene su grupo en Las Palmas de Gran Canaria se pueden degustar los productos de sus huertas en forma de selectos platos como gazpacho de sandía, sandía a la plancha con vinagreta de tomate y langostino, pimientos relleno de tortilla española, judías de la tierra con calamares, bacalao a la plancha con miel de palma y puré de calabaza o como postre, para terminar, panna cotta de calabaza. Una selección de platos que se incluyeron en la últimas Jornadas Gastronómicas celebradas en este local con el título De la Huerta a la mesa, pero que siempre están en el menú que ofrece a sus comensales el chef, Miguel Revuelta, puesto que en la filosofía de sus fogones es fundamental la preponderancia de los productos que se cosechan en sus huertas.

Para Joaquín Hernández, lo importante de una empresa es su capital humano, algo que demuestra que muchos de ellos como su responsable de productos congelados, Eva, lleve más de dieciocho años trabajando en la empresa. En ese sentido Hernández lo tiene claro: “si en Europa cada Pyme contratase a un trabajador, solucionaríamos el problema del desempleo”.

Etiquetas
stats