La falta de respeto por la naturaleza está llevando a la humanidad a un camino sin retorno, a la propia extinción de la especie. Los residuos se encuentran dispersos por tierra, mar y aire, ahogando a los seres vivos. “Va siendo hora de retirar esta siembra antrópica”, dicen con ironía colectivos conservacionistas que se han dirigido a este periódico para denunciar la presencia, desde el pasado mes de julio, de una taza de water 'plantada' en la subida al Refugio del Pilar. Concretamente, se localiza en la carretera de San Isidro, unos dos kilómetros antes de llegar a la Pared Vieja.