El consejero que denunció al grupo de CC en Lanzarote alerta de un “grave error” en el auto de archivo de la Audiencia de Las Palmas

El consejero del Cabildo de Lanzarote Juan Manuel Sosa ha pedido una aclaración a la Audiencia Provincial de Las Palmas sobre el auto que confirma el archivo de la denuncia que presentó, primero contra el expresidente Pedro San Ginés por amenazas, y después contra todos los representantes de Coalición Canaria (CC) en la corporación por la presunta falsificación del reglamento del grupo político para propiciar su expulsión.

En una nota difundida este viernes, Sosa considera que la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas ha incurrido en “un grave error” al creer que el denunciante era miembro y afiliado de CC, cuando milita en el partido político San Borondón y se presentó a las elecciones de 2019 en alianza con la formación liderada por San Ginés.

“Cuando alguien se afilia a un partido es evidente que corre el riesgo de que una conducta contraria a sus estatutos conlleve la expulsión del mismo”, reza el auto notificado este jueves a las partes. Para Sosa, no se trata de su caso, donde lo que se dirime es “la expulsión de un grupo político institucional de un consejero de otro partido, que no deriva de su afiliación a CC, sino de su inclusión en una lista electoral” fruto del acuerdo alcanzado entre San Borondón y CC, “lo que da lugar a deberes y derechos por completo diferentes de los derivados de la afiliación a un partido”.

Los abogados del consejero solicitarán a la Sección Sexta de la Audiencia de Las Palmas que aclare “la incongruencia en la que ha incurrido” en el archivo de su denuncia y ejercitarán “las acciones necesarias” para dejarlo sin efecto.

La denuncia

Sosa fue elegido en 2019 como consejero del Cabildo de Lanzarote tras el acuerdo electoral alcanzado entre su partido, San Borondón, y CC para concurrir juntos a los comicios. Tras una serie de discrepancias con el partido de Pedro San Ginés, el consejero decidió incorporarse al gobierno que preside la socialista Dolores Corujo, evitando de este modo que se pudiera presentar una moción de censura.

Fue a partir de ese momento cuando, según el denunciante, comenzaron las maniobras para expulsarle. Sosa sostenía que el expresidente del Cabildo le citó en su casa de Arrecife y le mostró en la pantalla de su ordenador un documento con la presunta querella que iba a presentar contra él y que le podía costar hasta seis años de cárcel y la devolución de 85.000 euros. Además, siempre según la versión del consejero, San Ginés le hizo leer un segundo documento con supuestas noticias que se publicarían en periódicos de tirada nacional si no dimitía de su cargo antes de una fecha.

Sosa no presentó su renuncia y CC acabó expulsándolo tras intentarlo hasta en tres ocasiones. Para ello, se apoyó en un reglamento interno que, según el consejero, no existía y fue creado “artificialmente” para justificar su expulsión.