PP y PRC han anunciado este martes un acuerdo parlamentario para aprobar una Ley de Políticas de Juventud, en la cual la formación de la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga (PP), ha introducido 55 enmiendas de “carácter técnico”. Lo significativo de este anuncio es que se trata del primer pacto político tras la designación de Paula Fernández como candidata autonómica del PRC, que había defendido públicamente una oposición más férrea al Gobierno, por lo que la continuidad de la buena relación entre ambas formaciones esta legislatura no se ve afectada por el momento.
Pedro Hernando, portavoz regionalista, ha considerado este martes en una convocatoria de urgencia que su partido llegará a acuerdos “por el bien de Cantabria” con cualquier formación, incluida Vox. “Nuestro objetivo en política de pactos son los cántabros”, ha sentenciado.
Hernando ha añadido que su grupo parlamentario apoya o deja de apoyar iniciativas según este criterio, cosa que se ha visto en la sesión plenaria de este pasado lunes, sin descartar a priori a nadie. “Si es por el bien de Cantabria, estaríamos dispuestos a llegar a algún tipo de acuerdo, que no pacto, con Vox”, ha expuesto.
La Ley de Políticas de Juventud de Cantabria se aprobará en junio por la Cámara una vez que PP y PRC han llegado a un acuerdo, puesto que suman una mayoría suficiente. La norma ha surgido, como proposición de ley, desde las Juventudes Regionalistas, y a ella se ha incorporado el PP con sus enmiendas, ya aceptadas por el PRC. Con este pacto es suficiente para su aprobación, aunque los firmantes del acuerdo están abiertos a que otras formaciones “respalden” el texto.
Juan José Alonso, portavoz del PP, ha indicado al respecto que la intención de su formación era legislar sobre esta materia, por lo que no ha tenido inconveniente en entrar a negociar con los regionalistas. Tampoco han tenido mayor problema estos, visto que las enmiendas son aportaciones que califican de técnicas y hechas por los diversos departamentos afectados del Ejecutivo autonómico.
Así las cosas, ambos portavoces se han felicitado por el acuerdo alcanzado. Alonso, por el PP, ha reiterado que las políticas en esta área son un “compromiso” de la presidenta Buruaga y cubren una “laguna legislativa” sobre la materia en la comunidad autónoma.
Hernando, por su parte, ha destacado que el contenido de la ley afectará transversalmente otras políticas, ya que atañe al acceso a la vivienda, la educación y el transporte, entre otras que afectan a los cántabros de entre 14 y 30 años, rango de edad establecido por la norma.
Asimismo, ha indicado que la ley “no es un brindis al sol” con declaraciones vacías de contenido, sino que lo tiene, a expensas de que posteriormente pueda desarrollarse con normativa de rango inferior. “Seguimos trabajando y hemos aprobado una iniciativa buena para Cantabria. Estamos contentos porque hay ley y es una buena ley”, ha concluido.
Una de las consecuencias de esta ley es la creación de un nuevo órgano, complementario del Consejo de Juventud, en el que se sentarán representantes de los grupos parlamentarios y las universidades, por ejemplo, y que tendrá el nombre de Consejo de Políticas de Juventud, aunque ambos partidos han evitado entrar en más detalles ni hacer públicas las enmiendas que han pactado para sacar adelante la norma en el Parlamento de Cantabria.