Este blog recoge la primera etapa de El Diari de l'Educació, ahora un medio con identidad propia, que forma parte de un proyecto de periodismo independiente comprometido en la defensa del Estado del bienestar.
Los estudiantes de la UB paralizan la aprobación de unos presupuestos recortados en un 1,5%
Un centenar de manifestantes bloquean el Consejo de Gobierno que debía votar las cuentas para el curso 2013
El rector reitera que no habrá despidos y pide perdón por el clima de confusión generado por la poca información transmitida desde la universidad
Ramírez confirma que los presupuestos sufrirán un recorte del 1,5% y contempla la amortización de patrimonio si finalmente la Generalitat pide más ajustes a los campus
La Universitat de Barcelona (UB) sigue sin presupuestos para 2013. Ante el convencimiento de que las cuentas que se debían aprobar este miércoles en el Consejo de Gobierno de la universidad contemplaban despidos, un centenar de manifestantes, la gran mayoría estudiantes, han paralizado el acto. Han bloqueado los accesos al rectorado y han impedido que se celebrara la reunión, de manera que la aprobación de los presupuestos queda aplazada al menos hasta la próxima semana, según ha comunicado el centro.
El rector de la UB, Dídac Ramírez, ha salido al paso de los incidentes para lamentar que se hayan producido algunos actos “vandálicos” a la hora de detener el consejo, pero acto seguido ha asumido parte de la responsabilidad. “Entiendo la desazón porque quizás no hemos dado toda la información y esto ha dado pie a la manipulación, pero no habrá despidos”. En este sentido, ha asegurado que dimitiría antes de aplicar un ERE en la UB.
Por su parte, desde la Plataforma Unitaria de Defensa de la Universidad Pública (PUDUP) han emitido un comunicado felicitándose por haber logrado el objetivo de detener temporalmente los presupuestos. En referencia a la denuncia por parte del rector de actos vandálicos aislados -ha habido desperfectos al menos en una puerta del rectorado-, la PUDUP ha asegurado que vandalismo son “las restricciones presupuestarias que está imponiendo la Generalitat de Catalunya en las universidades y que los rectores están acatando”.
Un recorte del 1,5% sin tocar la plantilla y a la espera de la Generalitat
Durante su comparecencia para valorar los hechos, Dídac Ramírez ha dado algunos detalles de los presupuestos que deberían haberse aprobado. El recorte en total será finalmente del 1,5% respecto al curso anterior -que ya se redujo en un 2% en comparación con el 2011-, un ajuste que aseguran que se traducirá solamente en una reducción de gastos de funcionamiento: “recortaremos en fotocopias, viajes, menos horas de limpieza, ya hemos cerrado algunos centros...” detallaba el responsable económico de la universidad.
Ramírez defiende a capa y espada que no se tocará el capítulo de personal, a pesar de que en el anteproyecto de los presupuestos que se llevaban hoy a votación consta un recorte de un 0,9% en esta partida, concentrada mayoritariamente en Personal de Administración y Servicios (PAS). A pesar de reiterar por activa y por pasiva que no habrá despidos, el rector no ha esclarecido este punto. Para cerrar la cuestión, ha sentenciado: “Esto no tiene nada que ver con lo que ha pasado en la UPC”, en referencia a que la aprobación de las cuentas de la Politécnica catalana acaba de dejar sin trabajo a más de 300 trabajadores.
En cualquier caso, Ramírez también ha reconocido que la validez de estos presupuestos está sujeta a la decisión que debe tomar la Generalitat sobre sus cuentas, pendientes a su vez de la posible relajación del techo del déficit por parte del Gobierno central. En este caso, han dado por hecho que no habrá ningún recorte adicional respecto de la partida del 2012 por parte del departamento de Economía y Conocimiento, y han decidio aprobar las cuentas antes para “garantizar la viabilidad de la universidad”, en palabras de Ramírez.
De todos modos, dejan la puerta abierta a una posible rebaja de la aportación de la Generalitat, un recorte que asumirían con unos “ingresos extraordinarios” ya previstos en los presupuestos. Esta inyección, según Ramírez, vendría de la “realización de patrimonio”, es decir, la venta, alquiler o explotación de derechos de las propiedades de la UB.
Esta medida, sin embargo, sólo se activaría si la Generalitat rebaja aún más su aportación a las universidades. Por ahora todo lo que se sabe, tras la reunión de los rectores con el secretario de Universidades e Investigación, Antoni Castellà, anoche, es que el Govern, si tiene que recortar más, lo hará de la manera “menos lesiva posible ”, según ha trasladado el rector a la prensa.
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