Collboni apela a la responsabilidad de los comuns y desvincula la aprobación de los presupuestos de un pacto de gobierno

A menos de un mes de la votación que aprobará o enviará a la papelera los presupuestos de Barcelona, el alcalde de la ciudad, Jaume Collboni, se ha mostrado seguro de que podrá sacar adelante sus primeras cuentas. “Somos un gobierno en minoría, se nos recuerda muy a menudo, pero hemos llegado a grandes acuerdos”, ha dicho, en referencia -entre otros- al pacto alcanzado con ERC para sacar adelante los presupuestos de 2024. 

Aun así, las cuentas todavía dependen del sí de los ‘comuns’, que sigue en el aire y que vinculan su voto a favor a que Collboni les ofrezca un pacto de gobierno. Pero el alcalde ha insistido en que la pelota está en el campo de los de Colau y ha asegurado que lo que está sobre la mesa son los presupuestos, que “en sí mismos, ya van de acuerdos políticos”. 

Con estas palabras, Collboni ha desvinculado la aprobación de las cuentas de un posible pacto de gobierno que pueda incluir a Barcelona en Comú o a ERC. “Paso a paso”, ha dicho. Sobre esto, ha asegurado que no tiene nada que ver con -la ya sabida- mala relación que mantienen el alcalde y la exalcaldesa Ada Colau. “No es una cuestión nominalista ni de personas”.

“Hay que ser serios”, es el mensaje que Collboni ha lanzado a los de Colau, que el pasado miércoles enviaron un documento al PSC con una serie de condiciones que chocan con el plan de Gobierno que defiende Collboni, entre ellas no ampliar el aeropuerto o mantener la norma que obliga a destinar el 30% de las nuevas promociones a vivienda social.

Así se ha expresado durante la 41ª sesión de 'L'alcalde respon', un histórico encuentro entre el edil y periodistas, que se ha celebrado en el Museu del Disseny de Barcelona. Durante el acto, el alcalde ha dedicado buena parte de su intervención a explicar su proyecto de gobierno, que ha vinculado a una “inversión histórica”. 

Y es que el alcalde ha prometido que la ciudad recibirá una inyección de inversión pública de 10,6 millones de euros hasta 2035 proveniente, “principalmente” de fondos municipales. Collboni se ha jactado de que se trata de “la mayor inversión pública desde los juegos de 1992”, que movilizaron el equivalente a 3.500 millones de euros. 

Esta inversión, que para empezar a aplicarse depende de la aprobación de los presupuestos, estará destinada a la una transformación urbanística “a la altura de la Barcelona olímpica o la de la Exposición Universal”, ha apuntado el alcalde, que ha anunciado la creación de diversos equipamientos culturales o ampliación del transporte público y ha insistido en que la creación de vivienda pública es una “prioridad” de su mandato. 

“La ciudad no puede estar al servicio del turismo”

El alcalde Collboni ha mantenido un coloquio con los periodistas Neus Tomàs, directora adjunta de elDiario.es; Eva Arderius, directora del programa Basics de Betevé; Jordi Corbalan, de Catalunya Ràdio; Enric Sierra, director adjunto de La Vanguardia y Josep Maria Morros, decano del Col·legi, que también han preguntado sobre otros temas como la sequía. 

Sobre esta crisis que azota a Catalunya, el alcalde ha expresado que “el consumidor no puede hacer más” y ha puesto la responsabilidad en la Agència Catalana de l’Aigua (ACA) y la Generalitat.

Preguntado sobre si el sector turístico también tiene parte de la responsabilidad, el alcalde ha apuntado que “no podemos empezar a culpar a los sectores, igual que hicimos en la pandemia” y ha zanjado el tema asegurando que su prioridad es que “sea como sea, debe salir agua cuando la ciudadanía abra el grifo”. Aun así, también ha apuntado que la ciudad, aunque todavía tiene margen de crecimiento, “no puede estar al servicio del turismo”.

La vivienda también ha sido uno de los temas tratados. Preguntado sobre qué ha pasado en los últimos 10 años, durante los cuales la vivienda ha pasado de tener un precio medio de 713 euros a uno de 1.123 en la actualidad, Collboni se ha remitido a reiterar que su gobierno destinará un 7% más del presupuesto en materia e vivienda. 

Igualmente, ha asegurado que el índice de precios del alquiler, aprobado esta semana por el Gobierno de España “será paliativo, pero no suficiente”. De esta manera, ha sacado pecho de los diversos pactos que el Ayuntamiento lleva haciendo cerca de un año con el Incasòl (ya desde el mandato de Ada Colau) para aumentar en 5.000 viviendas el parque público. 

De hecho, la cesión de suelo público o la compra de solares disponibles es la principal herramienta que reivindica Collboni para solucionar, desde sus competencias, el problema de la vivienda. Con esta decisión ha desechado otras medidas aprobadas por su predecesora, como la norma que obligaba a dedicar un 30% de toda nueva promoción al alquiler social. 

Sobre esto, Collboni ha reiterado, como ya ha hecho en diversas ocasiones, que la medida no dio “los resultados esperados” y, por eso, prefiere apostar por generar “un marco legal previsible y estable” para que el sector privado “se sienta cómodo” a la hora de invertir en vivienda en Barcelona. “Debemos desencallar la inversión privada y conseguir con eso el número de viviendas que quisimos conseguir con el 30%”, ha apuntado.