La crisis interna en Ciudadanos se extiende a Castellón: la dirección local lanza un candidato frente al de Cantó
Dos corrientes dentro de Ciudadanos en la ciudad de Castelló se estarían disputando el control de la formación: de un lado la facción oficialista liderada por Toni Cantó, que cuenta también entre sus filas con la diputada provincial Cristina Fernández, postula como candidato a Jesús Merino –hermano de Ruth Merino, persona de confianza en Valencia de la formación naranja-. Frente a estos, afines a Félix del Pozo, coordinador de la agrupación local actual, han lanzado un candidato alternativo de confianza para tratar de frenar a Cantó.
El candidato municipal de la junta directiva de la agrupación local, Alejandro Marin-Buck –elegido en una reunión extraordinaria celebrada el miércoles-, ha sido nombrado al margen de las directrices internas oficialistas, que denuncian que el movimiento contradice los estatutos de la formación. Dichos estatutos establecen que será únicamente el comité de candidaturas autonómico quien eleve las propuestas ante la dirección nacional, la cual se reunirá en Madrid el próximo día 25 para ratificar las listas de manera definitiva.
La jugada ha causado malestar en la formación naranja, que recientemente ya asistió a las pugnas internas en Castilla y León tras el pucherazo en favor de la candidata de Madrid durante las primarias. En Castelló, frente a la jugada de la junta directiva de la agrupación local, son numerosas las voces que piden la aplicación de medidas disciplinarias internas y la apertura de expedientes para los miembros del partido que levanten la voz contra las directrices de Madrid.
Juego sucio en Ciudadanos
Los ataques internos contra la corriente de la agrupación local y sus partidarios no se han hecho esperar. Voces de la formación denuncian que la proclamación de la candidatura al Congreso de Sandra Juliá, que ha venido ejerciendo como diputada nacional y secretaria de organización provincial, se ha llevado a cabo sin primarias ya que no contaría con el mínimo de afiliados en la provincia.
Según informan diversas fuentes, Juliá habría decidido cerrar discrecionalmente el grupo de Telegram a través del cual se comunicaba con los afiliados, “una vez que estaba claro que se iba a realizar un comunicado por parte de la dirección nacional para su proclamación como candidata al Congreso de los Diputados”.
Estas mismas fuentes afirman que la candidatura de Juliá se trataría de un intento de “atrincherarse” y señalan la estrecha relación de la candidata con Félix del Pozo e “intereses empresariales” dentro de la lucha por el poder dentro de la formación naranja en Castellón. De la misma forma manifiestan sentirse “decepcionados” porque creen que Juliá ha “aprovechado una situación de dificultad interna para reafirmarse en sus cargos orgánicos” sin contar con el apoyo de los afiliados.