Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
Sobre este blog

Espai Valencià es la avanzadilla de Som, un nuevo medio de noticias y opinión hecho en el País Valencià. Som será, además, la redacción y la voz de eldiario.es en este territorio, cuyo lanzamiento se producirá próximamente. Hasta entonces, este blog albergará contenidos informativos de los redactores de Som y piezas de opinión de algunos de los columnistas que colaborarán con el medio. 

¿Tiene voz Fabra?

Alberto Fabra y Mariano Rajoy en una imagen de archivo.

Juan Enrique Tur / Juan E. Tur

Apenas faltan unas horas para el inicio del debate de política general en las Cortes Valencianas y ningún medio estatal se hace eco de ello. La explicación políticamente correcta sería que la coincidencia temporal con el equivalente catalán, tras el despliegue independentista del 11S, hace que aquel eclipse al valenciano. Sin embargo hay otra explicación más certera, por triste que parezca: nadie –especialmente fuera de las fronteras del País Valencià— espera nada extraordinario de los gobernantes valencianos.

Y razones para ello no faltan, empezando por la principal: no hay precedentes de un gobierno valenciano que, de una manera firme, haya incomodado sustancialmente al estatal con una propuesta autónoma. Ninguno. Hasta los enfrentamientos más fuertes han girado en torno a reclamaciones estériles, como la del agua del Ebro, sin apenas repercusión en el resto del Estado, y que el tiempo ha confirmado —con su abandono por parte de sus promotores— que no eran más que un espectáculo para obtener réditos electorales.

La de la financiación autonómica, absolutamente perniciosa para los valencianos, fue la última. Francisco Camps hizo de la reclamación del cambio de modelo uno de sus caballos de batalla contra Zapatero mientras le asediaba su primera relación con la trama Gürtel. Sin embargo, ésta nunca se expresó con firmeza en la Meseta. Su sucesor accidental, Alberto Fabra, la retomó hace un año a su llegada a la presidencia del Consell, pero el ardor guerrero le duró lo que tardó Rajoy en adaptarse al Palacio de la Moncloa. Para cuando el gallego le recibió allí, el castellonense ya había llegado a la conclusión de que los valencianos podían seguir sacrificándose unos lustros más por el bien común de España.

¿Cabe pues esperar algo del debate de este martes? Desde una perspectiva optimista, sí. Supone el debut de Alberto Fabra en esta lid, y como demostró en sus primeras entrevistas a la prensa, previas a acceder al cargo que ahora ocupa, el castellonense se sabe la letra de lo que interesa a muchos valencianos: transparencia, mejor financiación, respeto a la pluralidad y la cultura propias, mantenimiento del estado del bienestar, empleo... Sin embargo, su año al frente de la Generalitat no invita a pensar que entonará esa canción en su intervención en la tribuna de Les Corts. Heredó de Camps un Consell lleno de responsables de la crisis particular que padece el País Valencià y prácticamente lo mantiene intacto; los implicados en asuntos turbios en las filas de su partido ocupan todavía sus escaños; ni una vez se ha salido del guión escrito en la madrileña calle Génova y nunca ha torcido el gesto —como sí han hecho muchos compañeros de siglas en otras geografías— ante una medida adoptada por el gobierno estatal que perjudicara a los valencianos. ¿No tiene Fabra una voz propia? ¿Dará alguna vez un titular ofreciendo una alternativa valenciana a los dictados que le llegan de poniente, erigiéndose como un político digno del puesto de responsabilidad que ocupa? Sólo de él depende, y este martes tiene una estupenda oportunidad de demostrarlo. ¿Veremos a un Fabra autónomo capaz de aprovechar debates como el de la independencia catalana para empezar a reclamar a Rajoy una financiación justa (sería tan sencillo como exponer que la solidaridad entre regiones no es unidireccional y no es egoísta que, si los valencianos están ahora más necesitados, la balanza se incline —aunque sea provisionalmente— a su favor) o dará el presidente la razón a aquellos que creen que —siguiendo una larga tradición— se le eligió para suceder a Camps por ser el candidato más aparentemente dócil de los que se barajaban en su partido? Lo dicho, está en sus manos.

Sobre este blog

Espai Valencià es la avanzadilla de Som, un nuevo medio de noticias y opinión hecho en el País Valencià. Som será, además, la redacción y la voz de eldiario.es en este territorio, cuyo lanzamiento se producirá próximamente. Hasta entonces, este blog albergará contenidos informativos de los redactores de Som y piezas de opinión de algunos de los columnistas que colaborarán con el medio. 

Etiquetas
stats