Rita Barberá esquiva todos sus problemas judiciales a la espera de 'Taula'
La exalcaldesa de València y hoy senadora del PP, Rita Barberá, está consiguiendo sortear todos los problemas judiciales que la han salpicado. Y los ha habido de diferentes tipos, desde no acatar la Ley de Memoria Histórica a los dispendios suntuosos del 'RitaLeaks' pasando por casos de más renombre como 'Gürtel' y 'Nóos', pero ahora debe salvar todavía un último escollo de su etapa de gobierno, la investigación de la posible financiación ilegal del PP a través de blanqueo de capitales de la 'operación Taula'.
Muy atrás queda ya la posible imputación de la alcaldesa en el caso 'Gürtel' cuando el juez archivo en 2012 la acusación de cohecho por el regalo de Álvaro Pérez 'el Bigotes' a Rita Barberá de diversos bolsos durante cuatro años, obsequios que se realizaban mientras la empresa Orange Market. El argumento para el archivo fue que el juez de la pieza de los trajes que juzgó a Camps conocía las grabaciones en las que Pérez hacía referencia a los regalos a la alcaldesa y no la imputó.
También quedó en nada la posible implicación de Barberá en el caso 'Nóos' así como también la de Francisco Camps. Aunque el juez José Castro, que instruyó la causa que tiene como epicentro a Iñaki Urdangarin, apreció delitos en la mediación de Barberá y Camps, por lo que envió la causa al TSJCV (los dirigentes del PP estaban aforados como diputados entonces en 2013) y este tribunal devolvió la causa a Palma de Mallorca al no encontrar indicios suficientemente sólidos.
No obstante esto no libró a Rita Barberá y Francisco Camps de tener que declarar como testigos en el juicio. En éste el mismo fiscal Pedro Horrach puso en cuestión la credibilidad del testimonio de la exalcaldesa. Pese a que se libró de la imputación a la exalcaldesa esto le valió la enemistad de su ex número 2, Alfonso Grau, quien la está poniendo en algún que otro aprieto.
Más recientemente Barberá se ha librado de no haber retirado símbolos franquistas del espacio público en València. Así a principios de julio el Tribunal Supremo archivaba la causa por incumplimiento de la Ley de Memoria Histórica al entender que no ha habido delito porque no ha habido desobediencia, apuntando que no se había dado una orden directa y expresa a la alcaldesa para retirar esos símbolos, ni tampoco que ella se hubiese negado a cumplir esa orden previa.
También en el Supremo la Fiscalía ha archivado la causa 'Ritaleaks' sobre los gastos lujosos de Rita Barberá por lo que se le acusó de malversación. El ministerio público ha justificado los gastos afirmando que regalos como los 30.000 euros en naranjas se hicieron por los motivos de la Navidad y que se hacía a políticos del PP porque era “el partido gobernante”. Sobre el resto de gastos afirma que había algún tipo de explicación aunque fuera “somera” o “breve”.
Operación 'Taula'
El último escollo al que tiene que hacer frente Barberá es la investigación de la 'operación Taula' donde se ve afectada por la rama del presunto blanqueo de capitales para financiar a su partido.
El juez Gómez, que instruye el caso, ha pedido al Tribunal Supremo (el tribunal competente para investigar, antes imputar, a Barberá como aforada que es) que investigue a la senadora por este blanqueo de capitales, por haber podido donar 1.000 euros al partido que habría recuperado con dos billetes de 500 en 'B' para las elecciones de 2015, ingreso que reconoce la exalcaldesa, pero no así la devolución donde radicaría la ilegalidad.
En esta causa hay imputados medio centenar de asesores y concejales del PP (entre ellos la práctica totalidad del actual grupo municipal del PP en València). Además cabe destacar que Rita Barberá, dentro de este mismo caso, también tiene sobre ella la sombra de las grabaciones de Marcos Benavent, el 'yonki del dinero', donde estaría en el centro de posibles amaños de contratos que ella niega.
Mientrastanto Barberá espera desde el búnker del Senado donde la ha blindado el PP, bastión desde donde advierte con mensajes amenazantes a los miembros de su partido que piden que se aparte sabiendo que, de momento nadie ha conseguido abatir esta pieza de caza mayor.