Ribó emplaza al ministro Ábalos y al conseller España: “La realidad es que València ha recibido cero euros para transporte público”

“Los hechos son muy claros y son que, al final, el transporte público de València recibe cero euros de Madrid, sea la culpa del Gobierno, de la Generalitat o de la Autoridad de Transporte Metropolitano de València (ATMV)”. Así se ha pronunciado este martes el alcalde de València, Joan Ribó, tras conocer la información publicada por eldiario.es relativa a los 200 millones de euros de financiación estatal que recibirá la Autoritat de Transport Metropolità de Barcelona, una parte de los cuales destinará a los autobuses urbanos de la ciudad, según confirmó el propio organismo.

Ribó ha anunciado que solicitará una entrevista tanto con el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, como con el conseller del mismo ramo, Arcadi España, para trasladarles la situación por la que está atravesando la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de València, que pedirá un crédito de 27,2 millones de euros para cubrir las pérdidas generadas por la pandemia: “La financiación de la EMT es el gran problema económico de este Ayuntamiento porque es una empresa 100% municipal”.

Según confirmó a este diario la Autoritat de Transport Metropolità de Barcelona, entidad equivalente a la ATMV, para que el Ministerio de Transportes calculara la ayuda que le corresponde trasladó la merma económica registrada en Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), entidad que gestiona la red de Metro y autobús tanto de Barcelona como de su área metropolitana y que, por tanto, destinaría parte de la ayuda recibida a los autobuses de la ciudad.

Sin embargo, el Ministerio de Transportes, que dirige el socialista valenciano José Luis Ábalos, ha aclarado que “en los servicios ferroviarios (metro, tranvía) y los servicios integrados en los consorcios de Madrid y la ATM de Barcelona se financia la caída de ingresos tarifarios de los servicios de transporte público de competencia autonómica calculados como 1/3 de los ingresos anuales por tarifa de estos servicios en 2018”.

El ministerio ha añadido que en estos consorcios de Madrid y Barcelona, que cuentan también con financiación de los ayuntamientos y en los que los ingresos por tarifa incluyen de manera indiferenciada servicios de distintos modos (de competencia local y autonómica), se aplica una metodología específica: “A partir de los ingresos anuales por tarifa, se calcula el importe del fondo que les correspondería; posteriormente, este importe se reduce en la misma proporción de participación de las entidades locales en dichos consorcios”.

Así, por ejemplo, en el caso del Consorcio de Madrid el importe calculado como el tercio de los ingresos anuales por tarifa se reduce un 14% (que es lo que financiaron las entidades locales al Consorcio en 2018) y en el de la Autoritat Metropolitana de Barcelona el 37% (que es lo que financiaron las entidades locales al consorcio en 2018).

Por tanto, en los datos de pérdida de ingresos aportados por las entidades metropolitanas de Madrid y de Barcelona no se tendrán en cuenta, o se “detraerán”, los de los buses urbanos de ambas ciudades a la hora de calcular la cuantía económica final que se les asignará, puesto que en ambos casos podrán acogerse al fondo específico para transporte público urbano que el Ministerio de Transportes negocia con el de Hacienda, al que podrán acogerse los ayuntamientos como el de València con empresas municipales de transportes.

Con todo, ya sea desde el ministerio o desde la conselleria de Transportes, la ATMV creada en el año 2017, en la que están integradas tanto Metrovalencia como la EMT, ha sido la gran desaparecida, a diferencia de lo que ha sucedido tanto en Madrid como en Barcelona.

El diputado valenciano de Compromís en el Congreso, Joan Baldoví, ha insistido en que “la ciudad de València no va a recibir ni un solo euro y en los Presupuestos Generales del Estado, Madrid recibe 126,9 millones, València solo recibe 10 millones de euros y otras ciudades reciben cantidades ridículas”.

Baldoví ha insistido en que “no se puede pretender que todo empiece en Madrid y Barcelona. España es mucho más plural y más amplia y otras áreas metropolitanas deberían tenerse en cuenta. El Ayuntamiento de València se ha planteado un crédito de 27 millones para cuadrar las cuentas de la EMT. Tenemos que pedir créditos para nuestra financiación y para el transporte. El mismo parón se ha producido en Madrid que en València. Es un varapalo del ministro de Transportes”.