València en Comú propone conectar el centro con el mar por el cauce del río
Todos los partidos políticos que aspiran a entrar en el Ayuntamiento estuvieron el lunes en el debate organizado por Salvem el Cabanyal en el Ateneo Marítimo. Con una escrupulosa medición de los tiempos por parte de la moderadora, los representantes de los partidos desgranaron, a lo largo de dos horas, sus respectivos programas en capítulos como urbanismo, con especial atención a los poblados marítimos, desarrollo económico, servicios sociales y cultura, entre otros asuntos, ante la atención de un numeroso público. Por València en Comú estuvo Jordi Peris, candidato a la alcaldía.
Según un comunicado de su partido, Jordi Peris denunció que “el modelo de crecimiento urbanístico del PP nos ha llevado a la ruina y ha comprometido nuestro futuro”, señalando grandes eventos como la Copa de América y la Fórmula 1 como causa de una “deuda descomunal”.
Respecto a la salida de Valencia al mar, Peris anunció que, si València en Comú gobierna el Ayuntamiento, derogará “inmediatamente” el proyecto de prolongación de la Avenida de Blasco Ibáñez. Y es que, a juicio de Peris, “la solución para El Cabanyal tiene que venir de los mismos vecinos, es la ciudadanía la que debe decidir qué quiere para sus barrios y cómo lo quiere”, abogando en este sentido por un “urbanismo participativo”.
El alcaldable de València en Comú propone “la prolongación del viejo cauce del río hasta el mar a través de conexiones verdes que unan la ciudad y el litoral”. Según Jordi Peris, se trataría de “conectar todos los barrios de la ciudad por ejes verdes que lleven hasta la playa” creando un cinturón en este sentido. Además, explicó Peris, “se solucionaría así el aislamiento del barrio de Nazaret”. Para la Dársena Real, el candidato a la alcaldía por València en Comú desveló su intención de hacer de este lugar “un espacio de disfrute público y de encuentro ciudadano y no un centro de consumo”.
En sucesivas intervenciones, Jordi Peris abogó por los derechos sociales, “sin los que no hay democracia”, por la paralización de los desahucios, por el derecho a una sanidad y a una educación públicas universales, gratuitas y de calidad y el por el derecho de la ciudadanía a suministros básicos como luz, agua y gas, recordando que “la vivienda no es una cuestión de asistencia social, sino uno de los derechos humanos”. En este sentido, defendió “la acción decidida del Ayuntamiento para ponerse al lado de las familias frente a los grandes bancos”.
Peris defendió también un nuevo modelo productivo para Valencia “basado en la sostenibilidad, la rehabilitación y el bienestar social y articulado con el I+D+I que desarrollen las universidades”. También propuso “cambiar el concepto de cultura desde una cultura de consumo a la creación cultural”, por lo que subrayó la apuesta de València en Comú por crear “espacios barriales de creación cultural para que la gente pueda participar en los procesos creativos”. Así, explicó que estos centros se establecerían “en función de la situación de cada barrio reforzando también los procesos de creación ya existentes y con modelos de gestión que se definirían según cada zona”.
Jordi Peris habló de Valencia como de “una ciudad abochornada por la corrupción y el despilfarro que padece una situación de emergencia social”. Ante esta situación, recordó que “los tiempos están cambiando”, que Valéncia en Comú está formada por “gente común al servicio de la gente común”, subrayó que los tres grandes ejes programáticos de la plataforma municipalista son “la regeneración democráticas, los derechos sociales y la participación” y animó a votar a Valéncia en Comú para hacer “una ciudad más humana, más justa, más igualitaria y más democrática”. Y es que, para Jordi Peris, “el cambio es ahora y es aquí, en la ciudad de Valencia”.
