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Cinco formas de reutilizar las botellas de plástico para cuidar tus plantas

Foto: comohacerpasoapaso.com

Eva San Martín

16 de abril de 2022 21:41 h

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Aunque suene irreconciliable, unir plantas y botellas de plástico en el mismo espacio (nuestra casa) nos resuelve más de un embrollo. El motivo: las botellas de plástico resultan tener un puñado de buenos usos prácticos que nos ayudan a cuidar de nuestras plantas.

Y podemos utilizarlas para crear maceteros baratos, colocar más plantas incluso cuando apenas tenemos sitio, y hasta hay formas de utilizarlas como pequeños invernaderos o para regar cuando no estamos en casa.

Y puesto que la avalancha de desechos plásticos anual ya ocupa entre 19 y 23 millones de toneladas métricas en las aguas de todo el mundo, parece una idea sensata intentar no agravar el problema; y reutilizar el plástico que ya tenemos en casa para que no acabe en los océanos. Con ese fin, aquí van cinco usos prácticos para reutilizar las botellas de plástico mientras que cuidamos de nuestras plantas

1. Planta un jardín vertical con botellas de plástico en la terraza

Nos encantan las plantas, pero vivimos en espacios urbanos pequeños y apenas nos sobra espacio horizontal en casa. Pues bien: ¡podemos arreglarlo pensando en vertical! Una idea: montar un jardín vertical de macetas en la terraza y hasta en el salón. 

 Si queremos hacerlo de un modo más económico, casi gratis, podemos reutilizar las botellas de plástico para crear esta pared vegetal en casa. Solo necesitamos recortar las botellas por la mitad con una tijera, y hacer unos agujeros en el tapón con ayuda de un clavo y un martillo, que servirán de agujeros de drenaje para el agua: lo colocaremos mirando para abajo.

Ahora solo nos queda añadir un poco de sustrato poroso en el fondo, como la vermiculita, un mineral muy utilizado en jardinería porque es ligero y retiene la humedad del riego. Esto evitará que la botella se encharque, y hará que la planta viva feliz. Lo llenamos de compost, o tierra o sustrato de jardinería que elijamos, y metemos nuestra planta.

Para colocar la maceta de botella de plástico en la pared, es útil contar con un enrejado o una celosía de madera: solo tendremos que clavarlas con un tornillo pequeño o una grapa. O podemos utilizar un enrejado metálico, y colgar las macetas de él con un gancho colgador. ¡Y listo!

Esta idea nos permite colocar muchas plantas en poco espacio, y es genial para flores, suculentas, y también para las lechugas de la terraza.

2. Macetero colgante con botella de plástico

Solo necesitamos una botella de plástico cortada por la mitad, con unas tijeras o un cúter, y hacer un par de agujeros en los lados con un clavo. Ahora anudamos una cuerda, atravesada por los agujeros, llenamos la botella como hemos contado, sin olvidarnos de hacer los agujeros al tapón. Y colocamos en ella la planta. ¡Ya tenemos un nuevo macetero colgante!

Y podemos dejarlo tal cual, o pintarlo, y hasta forrarlo con una tela bonita para darle un aspecto más cuidado a nuestra nueva maceta. 

3. Pequeño invernadero con botella

Uno de los usos más sorprendentes, pero prácticos: crear un invernadero. Una botella de plástico cortada por la mitad es un invernadero perfecto y gratuito para proteger las pequeñas plantas mientras crecen. No hay que hacer nada más: solo recortar una botella grande por la mitad, hacer unos agujeros para que la planta respire, ¡y cubrirlas con esta estupenda cúpula protectora!

4. Regar los tomates: con botella de plástico

Quienes vivimos en zonas húmedas sabemos lo complicado que resulta lograr que los tomates crezcan felices en casa: la humedad se lo pone fácil al hongo responsable del mildiu, y acaba por machacar las plantas. Para evitarlo, o prevenirlo, una botella de plástico sin tapón, cortada, dada la vuelva, y plantada en diagonal en la tierra junto a cada planta de tomate puede ponérnoslo mucho más fácil.

Al regar, solo hace falta llenar la botella, y esperar a que el agua llegue a las raíces sedientas, ¡y sin mojar el tallo ni las hojas del tomate en el camino! El mismo invento sirve para cualquier otra planta que prefiera mantener sus hojas secas.

 5. Regar cuando no estamos en casa: botella con cuerda

Y si a la maceta fabricada con una botella de plástico le añadimos otra botella cortada por debajo, las encajamos, y esta segunda la llenamos de agua, y añadimos una cuerda que una el agua y la tierra de la maceta superior, habremos creado una maceta de autorriego gratuita,  ¡que mantendrá las plantas con vida mientras estamos fuera de casa! 

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