València amplía al 50% de la ciudad la recogida de residuos orgánicos, lo que permitirá rebajar la tasa de basuras

El Ayuntamiento de València ha iniciado la ampliación del servicio de recogida selectiva de residuos orgánicos (restos de comida o de jardinería principalmente) que arrancó a modo de prueba en algunos puntos de Benimaclet, Campanar, Sant Marcel-lí y Sant Pau mediante la implantación del contenedor marrón.

La concejala de Medio Ambiente, Pilar Soriano, ha anunciado este lunes que hasta final de año se instalarán 1.370 nuevos depósitos en diferentes barrios de los distritos de L'Olivereta, Patraix, Jesús, La Saidïa, Rascanya, Benicalap, Benimàmet, Quatre Carreres y también Campanar,  donde se ampliarán los ya existentes.

La medida, que supondrá una inversión de 1,6 millones de euros, alcanzará así al 50% de la ciudad y permitrá que un total de 400.000 vecinos puedan reciclar los desperdicios orgánicos.

Según Soriano, a lo largo del año que viene se pondrá en marcha el servicio en el resto de la ciudad: “de esta forma damos cumplimiento al mandato de la Unión Europea que obliga a implantar la recogida selectiva de residuos orgánicos en el año 2020”.

La concejala, que además es la presidenta de la Entidad Metropolitana para el Tratamiento de Residuos (Emtre) en la que están integrados 43 municipios, ha explicado que la venta del compost que saldrá del tratamiento de estos residuos permitirá reducir la tasa de basuras (conocida como Tamer) en València en el año 2020.

Además, la Emtre aplicará bonificaciones a los ciudadanos y ciudadanas que más reciclen en los ecoparques fijos y móviles, mediante la entrega de un carné acreditativo, con el que se controlará lo que deposita cada usuario de los puntos limpios.

Soriano ha explicado que tras una reducción de la tasa de un 15% desde el año 2015 que se produjo el cambio de Gobierno municipal, en 2019 quedará congelada, por lo que las familias seguirán pagando de media 25 euros.

También ha comentado que han conseguido liquidar toda la deuda que se había generado en el Emtre, principalmente por la construcción de la planta de tratamiento de Hornillos ubicada en Quart de Poblet.

Además, la edil ha explicado a finales de este principios o principios del que viene arrancará la recogida de residuos puerta a puerta en 74 puntos de cinco nuevas zonas residenciales (Benicalap, Moreres, Quatre Carreres, Sociópolis y Ciutat Ros Casares), lo que implicará la retirada de contenedores de sus calles, ya que se hubicarán en los cuartos de basuras de los edificios.

La ampliación de la recogida selectiva de residuos orgánicos vendrá acompañada de una ambiciosa campaña de publicidad en medios de comunicación, mupis, marquesinas y buses de la EMT y mediante stands informativos en los diferentes barrios.

Soriano ha comentado que los residuos orgánicos suponen el 40% del total y ha hecho un llamamiento a la colaboración ciudadana, puesto que, tal y como ha recordado, todo lo que va al contenedor gris acaba en vertederos y el objetivo es reducir un 50% los desperdidicios que acaban en ellos.