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Las playas del sur de València han perdido entre 9 y 65 metros de arena en 30 años por las ampliaciones del Puerto

Estado de las playas del sur tras un temporal

Carlos Navarro Castelló

La posible afección de la ampliación norte del Puerto de València sobre las playas del sur y sobre el Parque Natural de l'Albufera es uno de los principales argumentos esgrimidos por entidades vecinales y ecologistas para oponerse al polémico macroproyecto.

Incluso el alcalde de València, Joan Ribó, votó en el seno del consejo de administración de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) en contra del inicio del proceso de adjudicación de las obras mientras no se haga una nueva Declaración de Impacto Ambiental (DIA) que sustituya a la de 2007 por las modificaciones que ha habido en el proyecto y que garantice que no va a haber afecciones en las playas del entorno.

La preocupación de los colectivos sociales y del alcalde por los efectos de la ampliación en las playas del sur de València está más que justificada a tenor de un estudio de la Universidad Politécnica que analiza el efecto sombra del Puerto entre Pinedo y el Perellonet entre los años 1984 y 2014.

El servicio Devesa-Albufera del Ayuntamiento de València, preocupado por esta situación de pérdida de arena de las playas del sur del término municipal e incluidas en el ámbito del Parque Natural encargó varios estudios para analizar la situación.

Según la delegación, “es a partir de la construcción del dique Norte (1921) y del nuevo dique del Este (1957) cuando el Puerto de València se convierte prácticamente en una barrera total al cortar por completo el paso de los sedimentos de norte a sur”.

El estudio más reciente es 'Caracterización de la textura de los sedimentos y evolución dela línea de costa desde Pinedo hasta la gola del Perelló mediante imágenes LANDSAT (1984-2014)' dirigido por Josep Pardo Pascual (grupo de investigación de cartografía geoambiental y teledetección de la Universidad Politécnica).

El objetivo del estudio es analizar la evolución a lo largo de estos 30 años de la línea de costa en el tramo de las playas del término de València situadas al sur del Puerto y el efecto de esta infraestructura en esta evolución.

Para ello, todo el tramo de costa (Pinedo hasta gola Perelló) se ha dividido en 17 sectores en los que se han analizado los diferentes parámetros.

Según los resultados, la playa de l'Arbre del Gos es la más efectada con una pérdida de 65 metros de arena, seguida de la Pinedo, entre espigones, que ha retrocedido 56,7 metros, la de la Creu que ha perdido 40 metros y las del Saler que han perdido 34 y 33 metros. La de Pinedo Norte, sin embargo, ha ganado 27 metros al ser la más pegada al Puerto.

En términos generales, según el documento, “se observa que a medida que nos alejamos del puerto el efecto de este sobre el proceso de erosión de la playa va disminuyendo produciéndose el punto de inflexión a partir de la gola del Pujol a partir del cual la costa se comporta de manera distinta presentando mayores momentos de acreción”.

Así, “la zona en la que predomina la erosión por efecto del puerto que abarca desde la playa de pinedo, tramo sur, hasta la malladeta-sur (Casal d’Esplai, más o menos) a partir de la cual podemos decir que ya no se nota el efecto del Puerto”.

El estudio concluye que “sin duda el principal responsable de la evolución de este sector de costa es el Puerto de València que produce la interrupción total del transporte de sedimentos procedentes de las playas del norte”.

Además, añade que “estas playas del sur del puerto no reciben sedimentos pero sí que sale material de ellas lo que genera un déficit muy alto que se resuelve haciéndoles perder arena ya que son ellas mismas las que tienen alimentarse. Esto genera que el límite erosivo vaya desplazándose hacia el sur”.

Estudios anteriores “fijaban en la zona de la gola del Pujol el límite erosivo. Ahora este efecto llega hasta la playa de la malladeta-norte y probablemente en los próximos años seguirá hacia el sur. Este desplazamiento de la onda erosiva hacia el sur, sin embargo, no es un proceso continuo sino que está sujeto a aceleraciones, ralentizaciones e, incluso, a inversiones debido a los efectos que pueda generar el oleaje y a las acciones humanas que se puedan desarrollar”.

Con el objeto de paliar el proceso de erosión que sufren las playas situadas al sur del puerto, la Demarcación de Costas de Valencia tiene previsto ejecutar el proyecto de 'Regeneración de las playas del Saler y Garrofera' que supone el aporte de 2.908.796 metros cúbicos de arena en el tramo de playa comprendido entre el espigón situado justo al norte de la playa del Arbre del Gos hasta la gola del Pujol (abarca los tramos en los que el proceso erosivo es muy fuerte).

El objetivo de este proyecto es la recuperación de la línea de costa existente en el año 1965 lo que supone en algunos puntos hasta 70 metros de ancho. Los técnicos municipales estiman que con el ritmo de pérdida de arena que se tiene calculado, se prevé una duración aproximada de la actuación de unos 55 años.

Al respecto, el vicealcalde de València y concejal de Devesa Albufera, Sergi Campillo, ha afirmado que el Ayuntamiento sigue esperando la ejecución de este proyecto de regeneración: “el Ayuntamiento tuvo que sumir la reparación de los destrozos del último temporal y del paseo marítimo de La Casbah que actúa como protección de las casas, cuando están en dominio público marítimo terrestre y por tanto son competencia y propiedad del Estado, que se negó en redondo a rehabilitar el paseo y dejó a los vecinos a merced de las olas”.

Campillo ha recordado que en una reunión posterior con la Demarcación de Costas se anunció el proyecto de regeneración de la costa del sur entre Pinedo y Cullera para que mantuviera una anchura de entre 70 y 80 metros. Sin embargo, “a día de hoy seguimos esperando ese proyecto y desde el Ayuntamiento estamos preocupados por las raquíticas inversiones que se reciben desde el Estado; es imprescindible recuperar la línea de costa del año 1965 teniendo en cuenta que el cambio climático empieza a incrementar el nivel del mar y eso pone en peligro el lago de la Albufera”.

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