La cooperativa que nace de la cooperativa
Una cooperativa al servicio de otras cooperativas ha hecho posible que siete mujeres puedan crear la suya propia con el acompañamiento suficiente para todos los trámites y estructuras que les son desconocidos. “Ninguna de nosotras sabe nada de administración por lo que sin la ayuda de la Cooperativa de Emprendedores de Navarra nos hubiera resultado más complicado poner en marcha todo”, cuenta María Fuertes, una de las siete mujeres que forma parte de Seina, la cooperativa de Servicios Integrales de Navarra, dedicada a la atención de personas dependientes así como a sus cuidadores.
La Cooperativa de Emprendedores, impulsada por la Asociación de Empresas de la Economía Social de Navarra (ANEL), funciona como paraguas para que aquellas personas que está comenzando con sus propios negocios. Les facilitan un asesoramiento y estructura ya creada que agiliza mucho los trámites de inicio. Así, se ofrecen servicios desde la elaboración de las nóminas o las facturas de la empresa, como acceso a recursos comunes, como pueden ser ordenadores, fotocopiadoras o teléfonos, hasta salas de trabajo o reuniones. “Nosotras ahora podemos dedicarnos a lo que realmente sabemos hacer que es ofrecer nuestros servicios de atención a dependientes”, afirma Fuertes.
Esta cooperativista y sus otras seis compañeras se conocieron hace un año en un curso para mujeres desempleadas. Todas tenían entre 30 y 45 años y unos perfiles comunes de auxiliares de clínicas y trabajadoras y educadoras sociales. Las 15 alumnas, a fuerza de verse todos los días, congeniaron bastante y finalmente siete de ellas decidieron montar su propia cooperativa. “Todas habíamos trabajado en hospitales y en residencias y hablábamos que el trato y los cuidados a los dependientes eran muy rápidos”, explica Fuertes, quien señala que siempre había querido montar algo por su cuenta con una atención más personalizada y profesional.
“Uno de los objetivos de nuestra cooperativa es ofrecer la máxima autonomía a las personas dependientes con un trabajo cualificado y de calidad porque creemos que es más beneficioso para ellas que estén atendidas el mayor tiempo posible en sus domicilios”, indica Fuertes, auxiliar de clínica y con muchos años de experiencia en hospitales y residencias. También señala que los servicios de Seina pueden ser muy beneficiosos para todas esas personas que debido a la crisis económica han tenido que sacar a sus familiares de las residencias por no poder asumir los costes.
Apoyo y asesoramiento a los cuidadores
En este sentido, la cooperativa ofrece también apoyo a las familias y personas cuidadoras de los dependientes. “Nos hemos encontrado muchas veces que los familiares no saben cómo asumir el cuidado, que movimientos hacer o no”, subraya Fuertes. Por ello, entre sus servicios está desde formación para atender de forma correcta a las personas dependientes hasta asesoramiento para eliminar barreras arquitectónicas o colocar mobiliario que facilite tanto la vida del dependiente como la del cuidador.
Tanto la Cooperativa de Emprendedores como Seina nacen dentro del marco de la Red Transfronteriza de la Economía Social y Solidaria (TESS), un proyecto cofinanciado por los fondos europeos FEDER a través del Programa de Cooperación Territorial España-Francia-Andorra, que tiene por objetivo la integración económica y social de estas tres zonas fronterizas. Con el proyecto TESS se pretende fortalecer la economía social de los tres territorios con el desarrollo y la continuidad de varias iniciativas.
Esa es la continuidad que pretende precisamente la cooperativa formada por las mujeres de Seina. “Hemos estado atendiendo a una persona mientras el tiempo que ha estado hospitalizada y ahora también tenemos a otras dos personas en atención a domicilio”, explica Fuertes, quien confía que la red vaya creciendo según vayan conociéndolas.