Aumentan los accidentes laborales en Extremadura a golpe de recortes en prevención
Ha sido una semana negra en la región, con la muerte de dos jóvenes en accidentes laborales de manera casi simultánea, junto a otra persona herida grave. “Es solo la punta del iceberg, los casos que salen a flote, porque accidentes hay a diario, y por desgracia cada vez más”.
Estas son las palabras de Ana Amaro, técnica en Prevención de Riesgos Laborales de UGT Extremadura, que señala que la crisis ha sido un buen ‘caldo de cultivo’ para prolongar los horarios del trabajador, aumentarle las responsabilidades, la nocturnidad… y además recortar con descaro en prevención de riesgos.
Relata incluso el caso de empleados que tras sufrir un accidente laboral eluden darse de baja. Otros que acuden a su centro laboral con evidentes síntomas de estar enfermos. Lo hacen por una razón muy sencilla: tienen miedo a quedarse en la calle.
Las cifras indican que el año pasado, por estas fechas, se habían registrado en Extremadura 11 accidentes laborales mortales. Este año ya van 12. Tanto UGT como CCOO coinciden en que los accidentes, con y sin baja, han aumentado de manera alarmante. Calculan que más de un 10 por ciento.
El mejor antídoto, la prevención
Señala la representante de UGT que los recortes traen consigo menos medidas de formación o una buena prevención. Supone por ejemplo, no respetar sus revisiones médicas periódicas, o no informar correctamente de los riesgos que puede correr haciendo su trabajo. Otras veces dejarlos solos ante tareas muy peligrosas.
“Y resulta que muchos de los accidentes, algunos con final trágico, se podrían haber evitado con un mínimo de prevención, y además hablamos de vidas humanas”, señala.
Hasta 75 muertes en accidentes laborales en 4 años
Las organizaciones sindicales no comparten los datos oficiales de accidentes mortales, porque según aclaran las estadísticas no contabilizan a aquellas personas que no estaban dadas de alta en la Seguridad Social. Es decir, además de morir en un accidente laboral, reciben peores condiciones. Según sus cálculos, en los últimos cuatro años habrían muerto hasta 75 trabajadores en Extremadura.
Destaca aquí por ejemplo el caso de un joven de 18 años que falleció en 2010 por una enfermedad profesional, por el uso de pesticidas continuado. Una muerte que o se incluyó como en el lista de siniestralidad laboral de Extremadura.