El futuro de Almaraz y su continuidad en 2020 se esclarece en junio
La fecha límite para solicitar la renovación de la actividad de Almaraz más allá de los 40 años expira a comienzos de junio, y en el caso de la central de Vandellós un mes más tarde.
Como marca la legislación, la central de Almaraz debe presentar la documentación para alargar su vida tres años antes de que expire su licencia. Con motivo de esta fecha el movimiento antinuclear convoca el 10 de junio en Madrid una gran manifestación bajo el lema ‘Cerrar Almaraz y todas las demás’.
“La ciudadanía debe opinar”
Se acerca una fecha clave, y el movimiento antinuclear quiere sacar a las calles el debate sobre de qué modelo energético quiere Extremadura: nucleares o renovables.
Este es el mensaje que trasladó este viernes el Movimiento Ibérico Antinuclear en un encuentro informal con el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, donde le reclamaron su apoyo contra las nucleares.
Al encuentro asistió el diputado nacional de Podemos, y líder de Equo, Juan López de Uralde, que adelanta que previsiblemente Iberdrola, Endesa y Gas Natural Fenosa solicitarán la ampliación de Almaraz.
Para Ecologistas en Acción se trata de un momento crucial, porque en esta legislatura se decidirá el futuro de dos centrales nucleares, y en el siguiente mandato el devenir de una tercera, Cofrentes. “En muy pocos años hay que tomar decisiones clave sobre las nucleares y el modelo energético que queremos”, señala Francisco Castejón, de Ecologistas.
Apunta a la incompatibilidad del modelo de las renovables y las nucleares, a las que acusa de frenar la expansión de las energías limpias y de todo el potencial que podrían tener para verter a la red eléctrica.
Para Ecologistas en Acción la nuclear no será necesaria para satisfacer las necesidades energéticas del país en el futuro, una cuestión que sin embargo no está encima del debate justo en el momento en que tienen que ampliar su permiso.
“Las eléctricas quieren pagar menos impuestos”
El diputado nacional Juan López de Uralde explica que las empresas propietarias de las nucleares reclaman al Gobierno que amplíe hasta dos años más el plazo para pedir la renovación de licencia (hacer el trámite en 2019, y no ahora). Su hipótesis es que las compañías desean hacer de este trámite una 'palanca de presión'.
En los últimos tiempos ha habido cambios impositivos que han aumentado el gravamen de los impuestos. Es decir, que las nucleares soportan mayor carga fiscal. Para el coportavoz de Equo y diputado de Unidos Podemos las eléctricas estarían creando ‘incertidumbre’ al Gobierno, y al conjunto del parque energético, a la espera de que les rebajen los impuestos, para después seguir produciendo.
El ATI de Almaraz
Está convencido de que la solicitud de construcción del almacén de residuos nucleares en el interior de Almaraz confirma los planes de ampliación de la central. Las instalaciones, proyectadas para funcionar durante 40 años, no están diseñadas para acumular más residuos y ahora --dice-- se ven obligadas a construir un pequeño cementerio nuclear para seguir generando energía.
Denuncia que las nucleares no han sido capaces de resolver los “viejos problemas” de la seguridad y los residuos, con la paralización del cementerio previsto en Villar de Cañas (Cuenca), informa Efe.
A esto añade Uralde la presencia de un Consejo de Seguridad Nuclear ‘politizado’. Argumenta que el proceso para alargar la vida de la de Garoña (Burgos) ha puesto de manifiesto hasta qué punto el Consejo de Seguridad Nuclear está “manipulado políticamente”, ya que se ha pronunciado a favor a pesar de que la empresa no cumplía con las condiciones que se le habían puesto para ello.
