Protesta contra el derribo de la presa de Valdecaballeros, su agua sería necesaria en esta sequía

La organización agraria Unión Extremadura hará una campaña y una marcha en contra el derrino del embalse de la central nuclear de Valdecaballeros (Badajoz) al considerar “inadmisible” destruir infraestructuras de esta naturaleza con la sequía que se está padeciendo.

Recuerda que la sequía hidráulica que se padece por segundo año consecutivo va a provocar que este año se deje “casi el 40 por ciento” [según Confederación es menos] de la superficie de riego del Guadiana sin poder hacerlo.

Por ello “no puede permitir que una presa que se encuentra aguas arriba de nuestros regadíos se destruya por capricho de una ministra” -en alusión a la titular de Transición Ecológica, Teresa Ribera- que, a su juicio, “antepone su credo al bienestar de los afectados por este embalse”.

Por este motivo, iniciará una campaña para impedir la demolición de este embalse que culminará con una marcha de reivindicación del mismo.

Todas las predicciones meteorológicas para el futuro, destacan, están de acuerdo en que el régimen de lluvias está cambiando, que se prevé menos precipitaciones y sobre todo que cuando sucedan las mismas can a ser menos duraderas pero más voluminosas. 

El ejemplo, ha alegado, es que tras muchos meses sin llover en diciembre la borrasca Efraín dejó en muchas zonas de la región alrededor de 200 litros por metro cuadrado en menos de 24 horas.

Por ello, La Unión ha insistido en que “deberíamos reforzar el sistema de almacenamiento de lluvias para recogerlas cuando sean torrenciales para aprovecharlas cuando no llueva”. 

Ha subrayado además que el embalse de Valdecaballeros, con una capacidad de 71 hectómetros cúbicos para distintos usos, abastece a los municipios de Castilblanco y Valdecaballeros y que “no se aprecia inconveniente alguno como no sea el de mantener una avifauna importante en la zona”.