El alcalde de Mérida recuerda a Vergeles que la salud pública es una “competencia impropia” de los ayuntamientos

El alcalde de Mérida, el socialista Antonio Rodríguez Osuna, ha felicitado las fiestas navideñas a través de sus redes sociales recordando que el uso de la mascarilla en exteriores ya es obligatorio en España, rechazando las restricciones, que en Extremadura no existen, pero también las medidas que se quedan en meras sugerencias.

Rodríguez Osuna ha explicado que el uso de la mascarilla en la calle es una “obligación legal que se debe cumplir sin excepción”. Además, recuerda que en el interior “ya era obligatoria salvo para comer y beber, y así debe seguir siéndolo”.

Por lo demás, ha subrayado que “lo que no está prohibido está permitido, y por tanto, no se tiene porqué anular la vida de la gente y de las empresas al dictado de recomendaciones o de sugerencias”.

El alcalde de la capital extremeña hace esta valoración un día después de que el consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles, pidiera por carta a los ayuntamientos de la comunidad autónoma que pospusiera o suspendieran actividades que supusieran un riesgo por las aglomeraciones que se esperan estos días. El consejero también quedó en recomendaciones el límite de diez personas en las reuniones privadas y que la duración de los eventos previstos en interiores recortaran la duración que tenían prevista.

A juicio de Rodríguez Osuna, “administraciones, políticos y opinadores han entrado en una competición para ver quién saca un minuto de gloria en la televisión suspendiendo o tomando decisiones de competencias impropias de los Ayuntamientos, como son las sanitarias”.

“El alto nivel de vacunación, la baja presión hospitalaria, la responsabilidad individual, el cumplimento de las normas obligadas, y la madurez como sociedad, debería ser suficiente” para hacer frente a la escalada de contagios de las últimas semanas, según Rodríguez Osuna. Por ello, pide que las medidas que sí son obligatorias se cumplan e invita a la prudencia para demostrar “que se puede y debe vivir con esta situación mientras no cambie la exigencia, y se tomen medidas extraordinarias por parte de los responsables de salud pública”