Vara ofrece a Jesús Cimarro seguir al frente del Festival de Mérida
“Esta es la historia de un éxito porque las cosas bien hechas bien parecen”. Con estas palabras de felicitación confirmaba Fernández Vara su deseo de que Jesús Cimarro siga como director del Festival de Mérida.
Cimarro, que entró a dirigir el certamen de teatro bajo el gobierno de Monago, seguirá al frente del certamen con toda seguridad. Tanto el nuevo gobierno socialista como el empresario y presidente de la patronal estatal de empresarios de teatro parecen entenderse.
Ha sido un día de balances, para presentar los datos de taquilla y recaudación del festival de teatro clásico, que la semana pasada cerraba el telón de la mano de los Premios Ceres. El Festival de Mérida ha clausurado su 61 edición con cerca de 93.950 espectadores y una recaudación de casi dos millones de euros. Tanto la dirección como el Ejecutivo extremeño han calificado de “éxito” la pasada de edición.
Unos datos que para Cimarro “hablan por sí solos del estado de bonanza que vive el Festival y que cada año va a más”. Entre otras cuestiones ha destacado el hecho de que se haya asentado el público que procede de otras comunidades, lago que según dice tiene una lectura clara: “hemos creado la necesidad de acudir a Mérida en verano”.
Según ha dicho la taquilla ha recaudado 1.924.686 euros, un 7,98% más que en 2014. Y el dinero que se devuelde a la Junta en esta edición (superávit) ha sido de 525.000 euros, de los que 100.000 irán a promocionar las giras teatrales de las compañías extremeñas al exterior, y el resto a la deuda que arrastra el festival.
Cimarro ha aclarado que su empresa, que gestiona el certamen desde que el PP lo externalizó, se queda con el 15 por ciento de 'superávit', y el resto se reintegra a la Junta.
Los Premios Ceres
Uno de los puntos de discusión entre la Junta y Jesús Cimmaro son los Premios Ceres. Vara ha reiterado de nuevo que los premios, que han sido un coste de 600.000 euros, buscarán el próximo año financiación privada.
De este modo Vara se ha mostrado su disposición a sentarse a hablar, y estudiar una fórmula para que su coste no recaigan sobre el presupuesto público.
Cimarro ha sido menos claro que en otras ocasiones, y se ha limitado a decir que los Ceres han ayudado “mucho” al festival en materia de repercusión cultural y de “visibilidad”. “A todo se le puede dar una vuelta, pero yo ya diré si sigo o no” al frente del festival.