Semana Santa, buena excusa para el fervor y el turismo, pendientes del cielo
Los pueblos y ciudades de Extremadura ultiman ya preparativos “mirando al cielo” ante el inicio de la que es la semana más intensa y emotiva del calendario, la Semana Santa, convertida ya en una excusa perfecta para aunar la devoción y fervor propios de un acontecimiento religioso con el disfrute del turismo.
Siempre la Semana Santa es singular para cada población, pero este año será especial para uno de los municipios extremeños que la vive con más intensidad en sus calles, Jerez de los Caballeros (Badajoz), que estrena su reconocimiento como Fiesta de Interés Turístico Nacional.
Así, la Semana Santa jerezana, de la que se ha valorado la singularidad de sus imágenes y su comunión con su fisonomía urbanística, declarada Conjunto Histórico Artístico Monumental en 1966, se une al selecto grupo que forman Cáceres (de Interés Turístico Internacional), Badajoz y Mérida, que completa la procesión de “Los empalaos”, de Valverde de la Vera (Cáceres).
A este grupo aspira a unirse Plasencia, que actualmente tiene catalogada su Semana Santa como Fiesta de Interés Turístico Regional junto a Trujillo (Cáceres) y que defiende su carácter de una de las más antiguas de la región, ya que se viene celebrando desde el siglo XII.
Mención aparte merecen las recreaciones de la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo, con Oliva de la Frontera (Badajoz), como principal exponente, con su “Pasión Viviente”, única reconocida de Interés Turístico Regional, aunque también se celebran en Torrecilla de los Angeles, Valdefuentes o Torreorgaz, a los que este año se sumará Torremocha, todos en la provincia de Cáceres, y Alburquerque (Badajoz)
Precisamente es en Jerez donde empieza este particular recorrido, el Domingo de Ramos, con la salida de la Pontificia y Real Cofradía de Santo Domingo de Guzmán y Nuestra Señora del Rosario, conocida como la de la “burriquita”, que es el inicio de una intensa semana, en la que el Jueves Santo marca su punto álgido.
Esta cofradía va acompañada de la banda de cornetas y tambores y escuadra de gastadores, guiones y piquete de fusileros del Cuartel General de la Brigada de la Legión de Viator (Almería), lo que le convierte en uno de los principales atractivos para miles de visitantes que deciden darse cita en sus empinadas y estrechas calles.
Pero si hay un escaparate internacional para la Semana Santa en Extremadura está en la ciudad de Cáceres y si hay una imagen es la del Cristo Negro y su procesión por la zona monumental intramuros en la noche del Miércoles Santo.
Como muestra de la proyección que esta cita tiene, Televisión Española retransmitirá tres procesiones de la Semana Santa de Cáceres, concretamente las procesiones del Cristo del Amor y de la Vera Cruz el Jueves Santo y El Santo Entierro el Viernes Santo.
En este particular “mapa” de la Semana Santa extremeña, parada destacada también es Mérida, cuyo patrimonio romano se convierte en el escenario de pasos como el del Cristo de las Tres Caídas y la Virgen de la Misericordia por el Puente Romano sobre el río Guadiana, el Miércoles Santo, o el vía crucis en el Antifeatro, el Sábado Santo.
Además, cuenta con el añadido de ser Capital Gastronómica de la Cultura Gastronómica, motivo por el que acoge la Feria del Dulce Conventual y Artesano, donde se ofrecerán más de sesenta variedades de dulces de diferentes conventos de la geografía extremeña, así como de obradores y pastelerías artesanas de Extremadura y Portugal.
Badajoz, con trece procesiones y casi 4.500 nazarenos, y Valverde de la Vera, con la procesión de “Los Empalaos”, en la madrugada del Jueves Santo por sus estrechas calles son otras paradas obligadas de esta semana de pasión, que el último día pone las miradas en Villanueva de la Serena y la tradicional “Carrerita” de la Virgen de la Aurora y su reencuentro con el Jesús Resucitado.
