La consejera de Medio Ambiente y grupos políticos se reunirán con AMUS para buscar soluciones
La organización conservacionista AMUS mantendrá en las próximas semanas reuniones con la consejera de Medio Ambiente, Begoña García, y los grupos políticos con representación en la Asamblea para encontrar soluciones de financiación y poder mantener el Hospital de Fauna Salvaje donde recuperan animales silvestres antes de proceder a su liberación.
El encuentro con la responsable de Medio Ambiente tendrá lugar el próximo 29 de mayo, en las instalaciones de la consejería, según adelanta a este diario el colectivo conservacionista, pero antes, la próxima semana, comenzarán una ronda de reuniones en la Asamblea con los diferentes grupos parlamentarios.
El colectivo conservacionista se muestra esperanzado y confía en alcanzar pronto una solución para poder contar con los 70.000 euros que necesita para mantener la actividad del hospital con el objeto de continuar recuperando fauna salvaje.
Gran impacto social
“No es tanto lo que pedimos”, según apunta AMUS, al tiempo que valora la predisposición al diálogo mostrada por la Junta, los partidos, y también por el alcalde de la localidad pacense de Villafranca de los Barros, Ramón Ropero, donde se ubican las instalaciones de la organización Acción por el Mundo Salvaje. El regidor les recibirá este viernes en el Ayuntamiento.
Las personas que integran este colectivo se muestran sorprendidas ante el gran impacto social que están teniendo sus peticiones, y la cantidad de propuestas que les están llegando de muchas partes para hallar una solución con el fin de continuar desarrollando una importante labor para la preservación de la fauna silvestre de la provincia de Badajoz.
A la espera de poder resolver los problemas de financiación en las reuniones previstas, desde AMUS alertan que algunas de las consecuencias por falta de recursos “pueden ser reales en pocos días”, ante “la avalancha de pollitos de todas las especies de aves” que están en peligro en los campos durante el periodo de siega y que podrían quedar abandonados a su suerte si la Administración no contrata directamente con esta organización el servicio de animales heridos.