No hay que llevar mascarilla en la construcción, la agricultura, ni para pasear por el campo solo o en familia
La mascarilla deja de ser obligatoria en Extremadura para los trabajadores del campo y de la construcción, y en general para todos los trabajos al aire libre que suponga un esfuerzo físico continuado, pero no deja de serlo en esos casos la distancia de seguridad de 1,5 metros; tampoco será obligatoria en los paseos por el campo solo o con personas que ocupen la misma vivienda.
La Junta se ha visto en la necesidad de aclarar el uso del tapabocas y para eso está redactando un decreto ley regulador, que incluye las sanciones, y que se publicará y entrará en vigor a principios de la semana que viene, si no le da tiempo para hacerlo este fin de semana.
“Flexibilizamos”, explica el consejero de Sanidad José María Vergeles, y así dejará de ser obligatorio en los trabajos al aire libre “que supongan esfuerzo físico intenso y continuado, por ejemplo el campo o la construcción; por evitar el virus crearíamos otros problemas de salud, un golpe de calor”.
Pero en esas actividades sigue siendo obligatoria la distancia, “que lo tengan en cuenta los empleadores, es de un metro y medio”.
Tampoco habrá que llevar mascarillas en “espacios naturales” y vías públicas fuera de los núcleos de población, si se está solo o con personas con las que se conviva, siempre que no haya mucha afluencia de personas y guardando distancia de seguridad.
En cuanto a las piscinas comunitarias, será de aplicación lo mismo que en las públicas, y no hay que llevar mascarilla si se está en el solárium y acompañado de personas con las que se convive, aunque igualmente guardando distancia. Según Vergeles ha habido discusiones entre vecinos por este motivo.
Dónde sí
Se mantiene su necesidad, bajo sanción, en la calle, espacios al aire libre y cualquier espacio cerrado de uso público abierto al público; en todos los centros de trabajo, en lugares de atención al público o uso común de los empleados, y en los espacios en los que no se atiende al público pero donde no se garantiza ventilación individual directa o indirecta.
El decreto ley autonómico hace que la regulación de la mascarilla, antes basada legalmente en la ley de Salud Pública, pasa a serlo de forma más precisa en esa nueva normativa que hablará de aforos, apertura de espacios de ocio, locales comerciales, etc.
La publicación y entrada en vigor de este decreto ley “vamos a intentar que sea a principios de la semana que viene si no podemos antes, este fin de semana, pero la decisión la comunicaremos hoy [viernes] a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado para que tengan en cuenta esta flexibilidad aunque la publicación de la resolución sea más tarde”.
En cuanto al procedimiento sancionador, también cambia, antes era Salud Pública (Junta de Extremadura) quien instruía el expediente. “Ahora queremos que fuerzas y cuerpos hagan la resolución previa, que esté muy hecha, y automáticamente Salud haga que la sanción le llegue cuanto antes al infractor, algo parecido a lo que pasa con las multas de tráfico”.
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