De alquiler en la Cidade da Cultura por 145 euros al mes
“Que hagan oficinas!”. En más de una ocasión y en múltiples ámbitos esta fue una de las diversas ideas surgidas, con más o menos ironía, para darle utilidad a la inmensidad de los edificios de la Cidade da Cultura que, aún sin terminar, ya tiene metros y metros cuadrados por ocupar. En la enésima reformulación de contenidos del complejo, la presentada el pasado junio bajo la denominación de Plan Gaiás, se anunciaba el traslado de parte de los servicios que ya funcionaban en el Archivo de Galicia al edificio de la Biblioteca de Galicia. En el “espacio liberado”, anunciaba la Xunta, se crearía un “centro de emprendimiento creativo”, “especializado en la incubación de empresas culturales”. Ese centro ya tiene forma legal y también precio: 120 euros al mes más IVA, esto es, 145 euros.
La Axencia Galega das Industrias Culturais (Agadic) redactó el pasado septiembre y publicó este miércoles en el DOG las “bases reguladoras de la gestión” de lo que denomina “espacio Emprende Cultura Gaiás” y que, según la Xunta, viene a ser “un espacio de coworking en el Gaiás para potenciar proyectos de emprendimiento en el campo cultural y creativo”, esto es, un lugar en el que personas interesadas podrán arrendar una parte del edificio para convertirlo en su despacho y allí recibir ciertas indicaciones sobre cómo poner en marcha una empresa en el ámbito de la cultura.
¿Qué da la Xunta a cambio de la “contraprestación” de 145 euros? Segundo lo dispuesto en la orden publicada, “una mesa de trabajo con conexión telefónica y de internet” y “una estantería”, además de la posibilidad de utilizar servicios comunes como una sala de reuniones, un despacho para juntas, buzones, un almacén y los servicios generales del Gaiás, tales como seguridad“, ”suministro eléctrico, agua y calefacción“. ”Inicialmente“, la Agadic -que ahora tiene también su sede en el Gaiás- proporcionará ”apoyo y asesoramiento en la creación de la empresa y organizará periódicamente exposiciones de ideas y proyectos, encuentros empresariales y actividades de formación“ sobre el ”emprendimiento“ en el ámbito cultural.
Así y todo, no parece hacer falta tener una empresa constituida para poder instalarse en la Cidade da Cultura. “Se admitirán tanto profesionales independientes como emprendedores que se encuentren en proceso de constitución de autónomos”. Podrán ser “diseñadores-ilustradores, profesionales de la comunicación, escritores-guionistas, editores, representantes y promotores artísticos, productores, gestores culturales, programadores de aplicaciones informáticas y proyectos culturales en internet y todos aquellos que tengan vinculación con el sector cultural”. Todos ellos podrán disponer, si cumplen los requisitos estipulados, de una oficina de diseño en un carísimo vivero de empresas.