Un ciudadano necesita 1.240 euros de media para “tener una vida digna” en Palma

Un ciudadano adulto -entendiéndose como tal a aquellas personas de entre 18 y 24 años (incluidos) que están trabajando y de 25 años en adelante- necesita 1.240 euros de media para “tener una vida digna” en Palma, según los resultados del cálculo del Salario de Referencia Local (SRL).

Así lo han hecho público el teniente de alcalde de Cultura y Bienestar Social, Antoni Noguera, y la coordinadora General de Bienestar Social, Catalina Trobat, este lunes en una rueda de prensa.

Noguera ha explicado que la presentación del cálculo del SRL en Palma “tiene como objetivo principal establecer cuál es el salario suficiente para que un trabajador y su familia puedan vivir en la Ciudad dignamente”.

Por su parte, Trobat ha dicho que “disponer de umbrales de SRL para Palma es un paso importante a la hora de orientar de manera adecuada y efectiva las ayudas económicas de urgencia social, en tanto que son instrumentos que complementan las políticas estatales y autonómicas de garantía de ingresos desde el ámbito local”.

Cálculo del SRL en Palma

Mediante el cálculo del SRL se puede establecer el umbral absoluto por debajo del que se entra en riesgo de pobreza, independientemente de la renta del resto de ciudadanos. Así, el Área de Bienestar dispone de una herramienta para poder de establecer las cuantías previstas en el catálogo de ayudas lo más ajustado posible a la realidad.

El estudio tiene en cuenta el número de miembros que forman una unidad de convivencia para saber cuánto dinero necesitan para llevar una vida digna, porque las posibilidades y realidades en este sentido determinan las necesidades de esta.

Así, el estudio considera niños y jóvenes a cargo a toda aquella persona hasta los 17 años (incluido) que se encuentran en el hogar y a las que tienen entre 18 y 24 años de edad (incluidos) que no estén trabajando. Mientras, considera persona adulta a aquellas entre 18 y 24 años (incluidos) que están trabajando y a las de 25 años de edad en adelante.

El cálculo del SRL se basa en determinar el gasto mínimo de cada tipo de unidad de convivencia en una serie de bienes y servicios que se consideran necesarios para una vida digna. Estos son alimentos y bebidas, limpieza e higiene personal, vivienda, gastos corrientes de vivienda, transporte, gastos personales y ocio, ropa y complementos, educación y gastos extraordinarios.

Dos personas adultas necesitan 1.971,19 euros

A partir del análisis de estos datos se han podido establecer las diferentes cuantías del Salario de Referencia Local en la ciudad de Palma.

De esta manera, una persona adulta necesita 1.421,60 euros para poder tener una vida digna en Palma; un adulto con un niño o joven a su cargo, 1.943,40 euros y una persona adulta con dos o tres jóvenes a su cargo, 2.708,42 euros.

Asimismo, dos personas adultas necesitan 1.971,19 euros en total para tener una vida digna -985,59 euros por adulto-; dos adultos y un niño o joven a su cargo, 2.532,40 euros en total -1.266,20 euros por adulto-; dos adultos con dos niños o jóvenes a cargo, 3.169.15 euros en total -1.584,58 euros por adulto- y dos personas adultas con tres o más niños a su cargo 4.044 euros en total -2.022 euros por adulto-.

Y, tres o más personas adultas sin niños ni jóvenes a su cargo necesitan 2.799,92 euros en total -840,03 euros por adulto- y tres o más adultos con niños o jóvenes a cargo, 4.011,69 euros en total -1.022,15 euros por adulto-.

De este modo, la media ponderada del SRL total en Palma asciende a 2.346,29 euros. Mientras que la media se sitúa en 1.240,94 euros por persona adulta.

La mayor parte del gasto es en la vivienda, alimentación y bebidas

La conclusión principal de este estudio es que el coste de la vivienda, la alimentación y las bebidas superan el 52% del gasto total del SRL en cada unidad de convivencia.

Al analizar el presupuesto de necesidades básicas que constituye el umbral del SRL por tipología de unidad de convivencia se constata, una vez más, el elevado peso que supone el coste de la vivienda en las unidades con una persona adulta -hasta el 39% del total del presupuesto-. Un 27% del presupuesto destinado a esta finalidad, y un 39% si se añaden los gastos corrientes de vivienda -electricidad, agua, gas, telefonía fija e internet, seguro del hogar, tasas relacionadas con la vivienda y gastos de comunidad-. La segunda partida más importante es la alimentación, que representa un 25% del total del presupuesto del SRL.

En este sentido, hay una disminución del peso de la partida de vivienda (19%) en dos unidades de convivencia -con hijos a cargo y dos o tres adultos-. Un comportamiento inverso es el de la partida de alimentación, que representa un 16% en las unidades de convivencia con una sola persona adulta, y un 30% del presupuesto de necesidades básicas en unidades de convivencia formadas por tres o más adultos con niños o jóvenes a cargo.

Con todo, y a diferencia de las estimaciones de los umbrales de pobreza relativa, los cálculos del SRL proporcionan unos umbrales absolutos en función del tipo de unidad de convivencia, por debajo de los que se puede considerar que una unidad familiar entra en riesgo de pobreza absoluta.