Obama lanza una segunda ronda de sanciones contra Putin
Las primeras sanciones aprobadas por EEUU y la UE contra Rusia por su intervención en Crimea eran simbólicas y tuvieron un efecto nulo. Barack Obama ha dado el jueves un paso más con el anuncio de una segunda entrega, dirigida contra altos dirigentes rusos cercanos a Valdímir Putin y –esta es la novedad– un banco ruso. Al igual que en la primera oportunidad, no podrán obtener un visado para entrar en EEUU y pueden ver incautados sus activos en el extranjero, si los tuvieran.
En una declaración pública de unos 10 minutos en los jardines de la Casa Blanca en la que no aceptó preguntas, Obama afirmó que ha firmado una orden ejecutiva que permitirá imponer castigos a “sectores industriales” de la economía rusa, lo que supone un salto cualitativo que hasta ahora Occidente había preferido no dar.
El presidente norteamericano no dio nombres en su intervención. Más tarde, se supo que los sancionados son 20 personas. Entre ellos está Sergéi Ivanov, jefe del Gabinete presidencial ruso, Alexéi Gromov, número dos de Ivanov, Sergéi Mironov, líder del partido Rusia Justa y diputado, Sergéi Zelezniak, vicepresidente de la Duma, Evgeni Bushmin, vicepresidente de la Cámara Alta, y el teniente general Igor Sergun, jefe de la inteligencia militar.
El banco elegido es Rossiya. La entidad financiera ha sido elegida por su relación con los altos cargos seleccionados.
La respuesta rusa
Inmediatamente después, se ha conocido la lista íntegra de políticos norteamericanos que van a recibir el mismo trato de Moscú tras la primera ronda de sanciones. Los sancionados son seis congresistas y tres altos cargos de la Casa Blanca. Los primeros son el presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, el líder de la mayoría demócrata en el Senado Harry Reid, y los senadores John McCain, Daniel Coats, Robert Menendez y Mary Landrieu. Los altos cargos de la Casa Blanca son Ben Rhodes y Caroline Atkinson, del Consejo de Seguridad Nacional, y Daniel Pfeiffer, asesor de Obama.