Los votantes de izquierda en Francia dudan sobre Macron

Lo más probable es que Emmanuel Macron gane a Marine Le Pen en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales francesas. Políticos de todo el espectro, de derechas y de izquierdas, han cerrado filas y están haciendo campaña a su favor con el objetivo de impedir el avance de la candidata del Frente Nacional, de extrema derecha, que consideran una amenaza para la democracia.

Sin embargo, Jean-Luc Mélenchon, que en la primera vuelta cosechó el 19% de los votos, todavía no ha decidido qué hacer ni ha indicado a sus seguidores a quién deberían votar. Lo que hagan estos votantes será crucial para Macron, que representa las ideas económicas liberales favorables a las empresas.

Macron fue el candidato con más votos en la primera vuelta; el 23,8%. Sin embargo, los candidatos euroescépticos, entre los que se incluye Mélenchon, consiguieron más votos que nunca. Estos candidatos sumaron el 46% de los votos. Casi la mitad de los votantes apoyaron a candidatos que son críticos con el capitalismo global de libre mercado.

Hemos preguntado a algunos votantes de izquierda qué opinan de los dos candidatos que han pasado a la segunda vuelta y si votarán a Macron. Estas son sus respuestas.

“Las políticas de Macron solo traerán una mayor injusticia social y el Frente Nacional saldrá reforzado”

Eddy, 39, Dijón, funcionaria municipal

“Voté a Mélenchon porque es el único que presentó un programa que podría suponer mejoras para algunas cuestiones sociales y para el medioambiente. Obviamente, ni me planteo votar a Le Pen, pero lo cierto es que tampoco estoy segura de si votaré a Macron. Las medidas que quiere impulsar harán que la injusticia aumente y el Frente Nacional saldrá reforzado.

Macron defenderá el liberalismo económico. Nada nuevo. Sin embargo, todos parecen estar contentos: los medios de comunicación, las grandes empresas, los bancos y Alemania.

Los franceses están cansados de la clase política; hartos de los dos partidos de siempre. Supongo que piensan que si votan a Macron están votando a un candidato diferente pero lo cierto es que no es así.

Quiero que la UE se centre más en las personas y menos en los bancos y las grandes empresas.

El principal problema son los políticos que solo piensan en beneficiar a estas grandes empresas y al sector financiero, y piden a los ciudadanos que hagan esfuerzos que ellos, en cambio, no están dispuestos a hacer. Afirman que el sistema liberal es la única vía posible, pero en realidad si el reparto de la riqueza fuera más equitativo no tendríamos tanta miseria ni tanto racismo.

Así que todavía no sé a quién votaré“.

“Macron mantendrá el statu quo y será un títere de los lobbies empresariales e industriales”

Clement, 33, Londres, padre de dos niños

“Estoy bastante decepcionado, pero no sorprendido. Le Pen ha llegado a la segunda vuelta y Macron no es más que un producto de marketing que no dice nada sustancial. Es muy probable que se convierta en el próximo presidente de Francia y que impulse las mismas políticas liberales que tanto daño han hecho a tantas personas y que, en parte, son el motivo por el cual muchos franceses están votando a la extrema derecha.

Macron mantendrá el statu quo y será el títere de los lobbies de las grandes empresas que intoxican nuestra democracia. Es por este motivo que los alemanes y los mercados financieros están tan entusiasmados.

“Me siento acorralada, como si esto fuera el final de la izquierda francesa”

Camille, 33, ilustradora

Para mí, Marine Le Pen es la reencarnación del demonio y Macron no es más que un producto de marketing. Así que esta situación es un infierno para mí. Emmanuel Macron me queda demasiado a la derecha, pero espero que gane y evite que Marine Le Pen se convierta en presidenta. En resumen, me quedaré con el candidato menos malo.

El único aspecto positivo de una posible victoria de Macron es que no ganará Le Pen. Su programa es horrible y, además, no necesitamos a otra euroescéptica que nos separe todavía más que el Brexit.

Quería votar a Mélenchon pero su visión de Europa me hizo cambiar de idea y opté por votar a [Benoît] Hamon. No estoy contenta con la gestión de Hollande y Valls de los últimos cinco años pero considero que Hamon representaba un cambio. Y creo en el proyecto europeo.

El Brexit me pone enferma; también la ansiedad que causó a los franceses que viven en el Reino Unido. No quiero que algo así pase en ningún otro país. Me siento acorralada; como si esto fuera el fin de la izquierda francesa.

“Al menos, no hará grandes cambios”

Pierre, 25, Londres, diseñador

Obviamente, quiero que gane Emmanuel Macron. No lo voté en la primera vuelta, voté a Mélenchon. Sin embargo, no me quiero ni imaginar cómo sería mi país bajo el liderazgo de alguien como Marine Le Pen, que tiene ideas retrógradas y que quiere que Francia regrese a los años setenta. No tiene una visión de futuro o de desarrollo que contemple los cambios que se producen en el mundo. Tiene una visión de una Francia aislada.

No creo que Macron vaya a ser mejor que Hollande o que otros presidentes. La buena noticia es que no hará grandes cambios y, con suerte, podremos seguir estando “orgullosos” de nuestro país.

Bajo ningún concepto quiero que Francia salga de la UE. Nos ha tocado vivir en unos tiempos en los que los países quieren salir [de la UE]. Tenemos que evitarlo a toda costa.

“Solo puede ser infinitamente menos negativo que Marine Le Pen”

Angela, 75, biomatemática jubilada

Voté a Hamon, con la esperanza de que Macron consiguiera llegar a la segunda vuelta sin mi voto.

De hecho, tengo algunas reservas con respecto a Macron. Solo el tiempo nos dirá si puede ser positivo para Francia. Sin duda, su victoria sería infinitamente menos negativa que la de Marine Le Pen.

¿Los problemas en Francia? El distanciamiento de los jóvenes que viven en los barrios periféricos [banlieues]; en especial, pero no solo, los inmigrantes de segunda generación y los musulmanes que creen que no tienen futuro. La elevada tasa de desempleo y el racismo han empeorado esta situación.

Una victoria del Frente Nacional sería un desastre absoluto para Francia, Europa y tal vez para el mundo entero.

Traducido por Emma Reverter