De la Vega repite como vicepresidenta
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, permanecerá como 'número dos' del equipo de José Luis Rodríguez Zapatero en su segunda legislatura y mantendrá su triple cartera de vicepresidenta, ministra de la Presidencia y portavoz del Ejecutivo.
De la Vega, que fue la ministra mejor valorada durante la pasada legislatura, era una de las dos personas a las que Zapatero había confirmado públicamente antes de las elecciones --la otra era el vicepresidente segundo, Pedro Solbes--. En privado, el líder socialista la había confirmado también que mantendría todas sus competencias.
De la Vega, que fue secretaria de Estado de Justicia en el último Gobierno de Felipe González, no es militante del PSOE pero sí diputada socialista desde 1996, cuando obtuvo un escaño por Jaén. Posteriormente lo revalidó presentándose por Segovia (2000), Madrid (2004) y, en la IX legislatura, Valencia, provincia en la que nació en 1949.
Licenciada en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid, pertenece al Cuerpo de Secretarios Judiciales de la Jurisdicción Laboral. Su carrera política comenzó 1982, cuando fue nombrada directora de Gabinete del Ministro de Justicia. En 1985 pasó a ser directora general de Servicios del Ministerio de Justicia (1985).
De la Vega fue después letrada-jefe del Servicio de Personal del Consejo General del Poder Judicial y magistrada en 1989. Un año después fue nombrada vocal del Consejo General del Poder Judicial por elección del Senado (1990).
Tras ser elegida diputada, en la VII Legislatura (2000-2004) fue secretaria general del Grupo Parlamentario Socialista. Tras las elecciones de 2004, Zapatero la convirtió en vicepresidenta primera y uno de los puntales de su Gobierno.
Como ministra de Presidencia, De la Vega se ha encargado de dar apoyo político y técnico al Gobierno, ordenar y coordinar las tareas del Consejo de Ministros y presidir la Comisión de Subsecretarios y Secretarios de Estado que semanalmente prepara los asuntos que tendrá sobre su mesa el Consejo.
Pero además, ha sido la primera mujer en presidir un Consejo de Ministros --la primera vez fue en abril de 2004, mientras Zapatero hacía su primer viaje al extranjero-- y, a lo largo de la legislatura, ha recibido el encargo de Zapatero de resolver varios asuntos espinosos, como las negociaciones para la nueva financiación de la Iglesia católica y la búsqueda de medidas contra la inmigración irregular durante la crisis de los cayucos de 2006.
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