La rehabilitación de las casas antiguas: una alternativa al derribo

Los edificios pasan por procesos de deterioro a lo largo del tiempo. Aunque se trata de construcciones hechas para durar a medida que pasan los años, muchos elementos exteriores de los edificios se acaban estropeando y se generan desperfectos.

Para muchas comunidades de vecinos y organismos, la rehabilitación de sus edificios siempre supone un problema; ya que tienen que analizarlo bien y cómo afecta al edificio para hacer una valoración económica de su reparación.

Hay que tener en cuenta que cuando un edificio o una vivienda muy antigua manifiesta tener problemas de grietas, estructura, etc., no siempre es necesario demoler el edificio para volver a construir uno nuevo. De hecho, es mucho más recomendable hacer un buen análisis del estado del edificio y realizar su rehabilitación. Una empresa de rehabilitación de edificios puede proporcionar soluciones muy apropiadas para lograr que el edificio vuelva a estar en las mejores condiciones de uso.

Cuándo es necesario realizar la rehabilitación

Uno de los aspectos más importantes que hay que tener en cuenta cuando estamos ante una situación de un edificio con problemas es determinar si es necesaria su rehabilitación. Para tomar esta decisión se deben tener en cuenta varios aspectos y todos los afectados deben comprender la magnitud de los problemas y tomar una decisión consensuada en su resolución.

El estado de la fachada

Uno de los elementos importantes a tener en cuenta cuando vamos a tomar la decisión de rehabilitar un edificio es el nivel de deterioro que sufren la fachada. Aunque el deterioro de los elementos exteriores no compromete la estabilidad en sí del edificio, sin embargo, sí que puede suponer un problema para la salud de las personas que circulan por el entorno del edificio.

Riesgos asociados al desprendimiento de fachadas o caída de elementos al asfalto pueden ser una razón de peso para que se un edificio se someta a una rehabilitación exterior.

Problemas en la estructura o las vigas

Si los problemas del edificio están asociados a problemas de las vigas o columnas de la propia estructura, las consecuencias pueden ser más graves y afectar a la salud de las personas que habitan en él. En estos casos, hoy en día hay soluciones muy eficientes para lograr que los edificios puedan mantenerse sin riesgos para la salud. Se trata de la utilización de nuevos materiales para rellenar grietas o nuevos tipos de cemento especiales para realizar el aislamiento de pareces y ventanas; y así permitir que el edificio pueda seguir funcionando durante mucho más tiempo.

Eficiencia energética

Uno de los requisitos que en la actualidad se pide a los edificios es la eficiencia energética.

Para que un edificio cumpla con los estándares de calidad es necesario que permita ahorrar energía en su funcionamiento normal, evitando pérdidas de aire en las ventanas y puertas, o contando con materiales que son eficientes y que no contaminan y son duraderos.

En los edificios antiguos muchas de estas normas nuevas no se cumplen, lo que obliga también a realizar su rehabilitación para hacerlos edificios muchos más habitables y respetuosos con el entorno.

Si vives en un edificio donde se dan estas circunstancias será necesario proceder a su rehabilitación logrando así importantes beneficios tanto para la propia construcción como para sus inquilinos. De hecho, si un edificio es rehabilitado podrá ver incrementado su valor en el momento en que sea necesario venderlo. Además, el cumplimiento de la normativa en materia de eficiencia energética supondrá un ahorro económico importante en el consumo de energía para sus habitantes con las ventajas que eso puede suponer.

El mejor aspecto exterior de los viejos edificios rehabilitados también provoca una sensación de bienestar por encontrarse en un edificio más limpio y bonito. Por tanto, la rehabilitación de viejos edificios supone importantes ventajas para sus propietarios que no hay que menospreciar y que suponen un impacto económico mucho menor que si el edificio se demuele para volver a construir.

A todo esto habría que sumar el hecho de que gracias a la rehabilitación podremos estar tranquilos al saber que es un edificio seguro y que pueda durar muchos más años sin suponer un riesgo para sus inquilinos, sobre todo cuando todos los problemas estructurales y de diseño se han resuelto.