Las grandes empresas “chupan” del suministro eléctrico por valor de 150 millones de euros

El fraude eléctrico en España asciende a 150 millones de euros, el equivalente al consumo de la ciudad de Sevilla y su área metropolitana durante un año.

Las grandes empresas y particulares con altos consumos fueron responsables del 96% del fraude en 2015. Tan solo el 1% puede ser imputado a familias de bajos recursos, según publica Endesa en colaboración con la CNMV.

Hay que tener en cuenta, dice la empresa eléctrica, que gran número de familias están acogidas al bono social, por eso se estima que, “en contra de lo que muchas veces se piensa”, menos del 1% del fraude eléctrico cometido en España se debe a enganches ilegales efectuados por familias de bajos ingresos.

A este respecto, lo que importa no es el número de enganches, sino la cuantía de los que realizan las grandes empresas. Sus consumos eléctricos son muy altos y el fraude les supone un ahorro que les permite competir en posición ventajosa. El gasto que asume el sector eléctrico es trasladado a los consumidores que pagan sus facturas.

Por si fuera poco, a la competencia desleal o el pago de facturas engordadas por parte de los ciudadanos, hay que añadir “un problema grave para la seguridad y la salud de las personas que conviven o están próximas al defraudador”, y es que la seguridad se pone en entredicho cuando las instalaciones se manipulan, apartando a un lado la normativa en la materia.

Es esencial que las empresas eléctrica realicen acciones contra el fraude, para que el ciudadano no acabe pagándolo en su factura. Endesa afirma estar utilizando equipos especializados y aplicando avances tecnológicos en sus redes inteligentes. En 2015 se han detectado más de 83.522 casos, un 25% más que el año anterior.