Las mujeres toman la palabra: decálogo de conclusiones de la lucha feminista

A lo largo de la semana, Rioja2 ha dado voz a siete mujeres riojanas para conocer su punto de vista sobre la lucha feminista, recordar cómo vivieron el histórico 8 de marzo de 2018 y analizar el trabajo que queda por hacer en el camino hacia la igualdad real.

Sheyla Gutiérrez (ciclista), Ana Castellanos (preriodista y presidenta de la Asociación de la Prensa), Mariola Urrea (profesora de Derecho en la UR), Ángeles Goicoechea (responsable de la Unidad de Igualdad de la UR), María Pérez Fajardo (Coordinadora Feminista 8M), Laura Rueda (URFEM) y Bárbara Sáenz Orduña (sexóloga) coinciden en varios puntos y así los hemos recogido:

1. El 8M de 2018 fue un momento histórico: Lo definen como un día especial, una reivindicación colectiva, ilusionante, con nerviosismo, una explosión, un extraordinario resultado de algo que se venía fraguando hace tiempo, un punto de inflexión... Todas coinciden al señalar que fue un momento histórico.

2. La explosión del feminismo ha sido el resultado lógico de una lucha que estaba latente: Está claro que todo ha sido un paso má sen algo que ya venía caminando desde hace algunos años. María Pérez Fajardo recuerda por ejemplo la multitudinaria manifestación del 25 de noviembre de 2015 o la huelga de mujeres de 2017.

3. Ya nadie se rasga las vestiduras al hablar de feminismo: Es uno de los logros más recientes del feminismo, haber puesto el debate en la calle. Mariola Urrea recuerda cómo incluso Ana Patricia Botín se declaró abiertamente feminista, “algo insólito hace no demasiado tiempo”.

4. No se han dado cambios reales: Llega el punto negativo. Han cambiado cosas, pero no las suficientes. Los cambios no se terminan de materializar y la desigualdad sigue siendo enorme. Ángeles Goicoechea cree que se está haciendo sólo “un acompañamiento a medias” pero sin que los hombres dejen de tener sus privilegios sobre las mujeres.

5. Lo que más ha cambiado ha sido la conciencia individual y colectiva: Ahí si se han dado cambios y todas lo destacan. Las mujeres salimos a la calle, alzamos la voz, y lo hace también la sociedad ante la violencia o las agresiones sexistas. “Se incide poco en los cambios personales pero ahí sí ha habido grandes cambios de conciencia”, destaca Laura Rueda.

6. Es necesario implicar a los hombres: Bárbara Sáenz Orduña no entiende la lucha de las mujeres sin los hombres y Mariola Urrea considera que esa es una de las asignaturas pendientes, abrir el movimiento, “que ellos también se sientan implicados y nos acompañen, siendo nosotras protagonistas pero acompañándonos”.

7. Feminismo es igualdad: Nadie entiende por qué los hombres se sienten amenazados, “tal vez piensan que les vamos a hacer lo que ellos nos han hecho a nosotras”, señala Bárbara Sáenz. “Que alguien nos explique por qué se siente amenazado por la igualdad”, lanza Urrea.

8. Queda lo más difícil, lo que no se ve: Ángeles Goico cree que “nos han querido callar la boca porque ya salimos fuera de casa a trabajar” pero todavía queda mucho por lo que luchar, los micromachismos, esas cosas mucho más sutiles que no se ven.

9. Se están dando pasos hacia atrás: Si en algunos puntos se ha avanzado, en otros se va hacia atrás, y así lo reconocen la mayoría. “No puede ser que alguien venga ahora a hablar de derogar la Ley de Violencia Machista”, señala Ana Castellanos. “Se están poniendo en tela de juicio derechos que ya se habían conseguido”, insiste Bárbara Sáenz.

10. La importancia de la educación: Es el momento de hablar claro, de educar en los colegios y de poner la igualdad en la cumbre de la pirámide. Esta lucha ya no puede ir hacia atrás y es más necesaria que nunca desde las bases de la sociedad.