En imágenes: así vivieron las chamberileras la huelga feminista del 8-M

El 8 de marzo de 2018 ha sido una jornada histórica para la reivindicación de los derechos de la mujer. Cientos de miles de personas cerraron el día participando en la manifestación más numerosa que ha acogido Madrid en los últimos años, reclamando igualdad real y políticas que lo propicien.

Antes de todo eso, por la mañana y por la tarde, los barrios y los distritos tomaron el protagonismo. Allí, las mujeres hicieron huelga, se manifestaron y visibilizaron su protesta como nunca antes en España. En Chamberí el día comenzó con algunos delantales colgados en los balcones.

Horas antes, el programa de movilizaciones feministas había comenzado con una cacerolada en la plaza de Olavide, a medianoche, en la que participó un nutrido grupo de mujeres:

Ya por la mañana, muchos comercios apoyaban la huelga. Otros incluso cerraban. Algunos tenían que abrir a medias porque sus trabajadoras no habían acudido a trabajar:

Comercios e instituciones del distrito teñían sus logos de morado para celebrar este día. Como el CV Madrid Chamberí, que recordaban el pregón de las pasadas fiestas del Carmen, con un discurso en torno a la igualdad:

En el distrito el acto central tuvo lugar en la plaza de Chamberí, con la lectura de un manifiesto al que acudieron decenas de mujeres. Esta imagen da una idea de lo nutrido de la convocatoria, pese a que esa hora había actos simultáneos del mismo tipo en todo Madrid:

En la plaza se escucharon cánticos de todo tipo. Aquí va uno de ellos:

Pasado el acto había que recuperar fuerzas. Uno de los lugares que acogieron comidas comunales fue la Casa de Cultura de Chamberí, convertida durante esta jornada en un punto de cuidados para los niños y mayores a cargo de los hombres que hoy apoyaban la huelga de mujeres.

Y después de la comida, a preparar los carteles con los que se acudiría a la protesta de por la tarde:

Ya por la tarde-noche, Chamberí se vació de feministas. Todas estaban en la manifestación, que se convirtió en una demostración de fuerza del movimiento por la igualdad. Fue el colofón a un día que pasará a los libros de historia de los derechos de la mujer.