El Ayuntamiento quiere abrir al barrio las pistas deportivas de los colegios
Jugar al fútbol en las calles del distrito Centro se ha convertido casi en una misión imposible. Solo existen dos campos de fútbol sala disponibles, los de Conde Duque y en la calle Casino de Lavapiés, donde también hay cancha de baloncesto. Fuera de estos lugares, sus 134.000 habitantes tienen que desplazarse a otras zonas de Madrid para poder jugar a la pelota en equipo.
Esta es la situación de partida que le ha llevado al Ayuntamiento a plantearse aprovechar los solares vacíos y convertirlos en espacios deportivos, además de utilizar las instalaciones existentes en los institutos y abrirlas para que los vecinos puedan usarlas durante las tardes e incluso los fines de semana.
“Hay que darle mucho a la imaginación. Queremos llegar a acuerdos con institutos públicos para que abran sus instalaciones deportivas en horario extraescolar bajo nuestra supervisión”, explicaba el concejal de distrito, Jorge García Castaño, en una entrevista reciente a El País. Para ello tendrá que llegar a acuerdos con la Comunidad de Madrid, responsable de los centros.
En Malasaña la oferta de pistas deportivas en centros educativos es escasa pero no inexistente. El mejor dotado es el Instituto Lope de Vega, que cuenta con sendas pistas deportivas de fútbol sala y baloncesto al aire libre (una de ellas, la en imagen de la derecha), además de gimnasio. El San Mateo tiene pista multiusos recién renovada, al igual que el colegio cercano de Isabel La Católica. El Pi i Margall, en el Dos de Mayo, también dispone de un modesto patio con canastas.
Una pista deportiva en Barceló
Las declaraciones de García Castaño en esa misma entrevista ha causado un pequeño revuelo entre los vecinos que promovieron el proyecto de los Jardines del Arquitecto Ribera, en concreto una frase que daba a entender que en el solar de Barceló habría un campo de fútbol: “Tenemos solares baldíos que queremos poner en uso. En Embajadores queremos abrir uno como pista de fútbol. En Barceló y La Cebada también”, decía el concejal en El País. Somos Malasaña publicó una información inicial en este sentido.
Sin embargo, el propio concejal se ha encargado de señalar en Twitter que se trataba de un error y que no habrá tal campo. Los vecinos sí que sugirieron en una de las últimas reuniones técnicas con el Ayuntamiento que se colocara una zona deportiva junto al colegio Isabel La Católica, en la que no estaba prevista construcción alguna. Se propuso una canasta o un espacio similar para niños de más edad que los que ya disfrutarán del parque infantil. Y así parece que se construirá.
Por el momento la adjudicación de las obras de los Jardines del Arquitecto Ribera se encuentra parada, pese a que el anterior equipo del Ayuntamiento de Madrid sacó a concurso la construcción del nuevo parque. Según este concurso, los trabajos deberían haber comenzado el pasado 1 de julio.
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