La Meseta es un nuevo blog en el que Castilla y León se abre a la red, sin cortapisas, sin presiones y con un único objetivo: informar, contar, relatar. Informar lo que ocurre esta Comunidad Autónoma sin que nadie imponga sus criterios. Contar lo que habitualmente no se encuentra ni en la Red ni en papel. Relatar opiniones de los que tengan algo de qué opinar. Todo ello pensado para una tierra mesetaria, en la que apenas hay sobresaltos, y con la pretensión de aportar un grano de arena para el avance intelectual y material de esta región.
El Parque Natural de Fuentes Carrionas, salpicado de caza ilegal
Fuentes Carrionas es uno de los parques naturales que convierten a Castilla y León en una región salpicada por la naturaleza. Está al norte de Palencia, junto a Cantabria y León y engloba a diez municipios de la montaña palentina. Diez pueblos que en la mayoría de los casos vive pendiente de la caza permitida en el Parque Natural.
Sin embargo, lo que debería ser una convivencia ordenada, y legal, entre caza y desarrollo de las localidades se convierte en constantes trampas a la legalidad para obtener importantes beneficios.
Los días 6 y 7 de octubre y 4 de noviembre de 2012 hubo una cacería en Fuentes Carrionas en la que participaron el celador mayor del Parque Natural, su hijo, un vigilante de la reserva de caza y un particular, un antiguo deportista de elite. Una cacería que derivó en una investigación judicial, que sigue su ritmo y que ha llevado al Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 1 de Cervera de Pisuerga (Palencia) a abrir un procedimiento abreviado contra el celador mayor.
Según un auto judicial, al que ha tenido acceso La Meseta, se pretende determinar si “los hechos imputados” al celador mayor son constitutivos de los delitos de falsedad documental, contra el medio ambiente y de malversación de caudales públicos. Sin embargo, este mismo escrito de la juez acuerda “el sobreseimiento” de la causa contra el cliente, el antiguo deportista, por “no resultar debidamente acreditada la comisión de la infracción penal”.
El auto judicial revela que en tres días salieron de caza las cuatro personas –el celador mayor, su hijo, el cliente y un vigilante de la reserva de caza- “en día de descanso laboral”, en “coche oficial”. El particular abatió “un ejemplar de ciervo macho” y otro de “rebeco macho”.
Estas cacerías “no habían sido autorizadas por la directora técnica de la Reserva, habiéndose estampado la firma en el permiso de caza” por parte del celador mayor, que lo hizo “por ordenador, haciendo un garabato y expidiéndolo el día 4 de septiembre de 2012 porque sabía que en ese periodo la directora técnica se encontraba de vacaciones”.
Aunque el escrito no cifra la cantidad que el particular “pagó en mano” al celador mayor, fuentes consultadas por La Meseta aseguran que el cazador podría haber pagado “algo más de 300 euros” como cuota de entrada y “otros 300 euros” por cada una de las piezas abatidas.
La investigación judicial sigue su rumbo, de la misma manera que continúan las sospechas sobre la existencia de más cazas ilegales.
Sobre este blog
La Meseta es un nuevo blog en el que Castilla y León se abre a la red, sin cortapisas, sin presiones y con un único objetivo: informar, contar, relatar. Informar lo que ocurre esta Comunidad Autónoma sin que nadie imponga sus criterios. Contar lo que habitualmente no se encuentra ni en la Red ni en papel. Relatar opiniones de los que tengan algo de qué opinar. Todo ello pensado para una tierra mesetaria, en la que apenas hay sobresaltos, y con la pretensión de aportar un grano de arena para el avance intelectual y material de esta región.