Híbridos, híbridos enchufables, GLP y GNC: ¿qué los diferencia?
Cada vez más personas interesadas en adquirir un coche piensan en alternativas a los tradicionales modelos de gasolina o diésel. Para cualquiera a quien un eléctrico no le sirva todavía para satisfacer sus necesidades de movilidad, híbrido es la palabra que viene inmediatamente a la mente. Pero, ¿qué es un vehículo híbrido en realidad o cuántas opciones diferentes pueden encajar en esa definición?
Técnicamente hablando, son híbridos, o híbridos eléctricos (BEV) según la clasificación de la DGT, los coches que combinan el empuje de un motor térmico y el de uno o varios motores eléctricos, los cuales se alimentan de una batería que el coche autorrecarga. Toyota y Lexus, su división de lujo, son las marcas más expertas en esta tecnología, que han popularizado modelos como el Prius y el Auris, de la primera marca, y los RX, GS, LS o, próximamente, UX, de la segunda.
Otros fabricantes que se han apuntado hace tiempo a la tecnología híbrida son Kia, con el muy equilibrado Niro, por ejemplo; Ford, que tiene una interesante versión rutera de su berlina, el Mondeo HEV; o Mercedes, con el Clase C hybrid, a los que se suman numerosos modelos de Suzuki, Renault y Range Rover, entre otros.
Si lo que se necesita es mayor autonomía puramente eléctrica, se puede recurrir ya a bastantes modelos híbridos enchufables (PHEV), es decir, que pueden recargarse en la red eléctrica. Durante el año pasado, los más vendidos fueron los Mitsubishi Outlander, BMW 225xe, Mercedes GLC e350, Mini Cooper S E Countryman y Volkswagen Golf GTE. Porsche, Kia y otras marcas cuentan también en su catálogo con variantes de estas características.
En un uso más libre de la expresión híbrido, cada vez es más frecuente referirse con ella a modelos que pueden moverse tanto con un combustible convencional, generalmente gasolina, como con gas natural comprimido (GNC) o gas licuado del petróleo (GLP), razón por la que se les suele denominar bifuel.
Implantado antes que el GNC en países como el nuestro, el GLP ha sido un combustible por el que han apostado de manera decidida fabricantes como el Grupo Fiat, que oferta hasta siete coches propulsados por este gas; Dacia, que tiene en el mercado ocho versiones, Ford, Opel, Mercedes, Renault y SsangYong.
En los últimos tiempos están gozando de notable aceptación los híbridos que funcionan indistintamente con gasolina y con GNC, aunque este sea el combustible que se utiliza por defecto, esto es, hasta que se agota, momento en el cual el coche pasa a emplear de forma automática el otro carburante. Sin duda el Grupo Volkswagen, y Seat en particular, han tomado la delantera en este campo.
El León, concretamente, es el rey de las versiones de GNC, con cerca de 950 unidades vendidas durante 2017 gracias a una poderosa campaña de marketing que incluía ofertas muy apetitosas para inclinarse por esta opción alternativa a lo convencional. Los siguientes modelos más populares, por sus cifras de comercialización, son el Skoda Octavia, aunque a gran distancia del León (168 unidades), el Seat Mii y el Seat Ibiza.
La ventaja fundamental de los híbridos de GLP y GNC es que ofrecen una autonomía que puede rondar los 1.200 kilómetros (la suma de los dos depósitos) y, al mismo tiempo, presentan un bajo nivel de emisiones en ciudad que los hace merecedores del distintivo ECO de la DGT.
RASTREATOR - WIDGET END RASTREATOR - WIDGET
