El Gobierno acuerda con UGT, CCOO y CEN las políticas activas de empleo
Un día después de que CCOO aportase 75 iniciativas para el Plan de Empleo, el Gobierno anuncia que los sindicatos presentes en el Consejo de Diálogo Social (UGT y CCOO) y la patronal (CEN) han alcanzado un acuerdo sobre las políticas activas de empleo que formarán parte del citado plan. Un acuerdo que deberá ratificar en septiembre el Servicio Navarro de Empleo, fecha en la que seguirán negociando el resto del plan. El vicepresidente económico, Manu Ayerdi, se ha felicitado por el acuerdo. Pero no ha podido evitar referirse a la ausencia de ELA y LAB en esta negociación a la que fueron invitados y cuya presencia declinaron.
“Como objetivo, siempre he deseado y ambicionado que seamos capaces entre todos, pero no puede ser algo que imponga el Gobierno, sino que sea algo consensuado con los cuatro sindicatos y con laCEN, el encontrar ese foro en el que nos podamos reunir”, ha reconocido Ayerdi. También ha señalado que “en el ámbito de lo discreto”, el Gobierno mantiene contactos con los dos sindicatos nacionalistas que no quieren negociar el Plan de Empleo en el seno del Consejo de Diálogo Social, cuya supresión exigen por considerarla una estructura de financiación soterrada para UGT, CCOO y CEN.
Ajeno a esta polémica que tensiona a los socios del cuatripartito, el vicepresidente Miguel Laparra ha señalado por su parte que el acuerdo alcanzado para las políticas activas de empleo “allana la negociación del resto del Plan de Empleo, que se abordará a partir de septiembre, y constata que el empleo es la principal preocupación y la meta común del Gobierno y de los agentes sociales”.
El documento acordado, recoge los objetivos y las líneas de actuación en los ámbitos de la creación de empleo (emprendimiento, desarrollo de la economía social o competitividad y desarrollo empresarial); la mejora de la empleabilidad de la población activa (formación y activación laboral); la inserción de colectivos e igualdad de oportunidades; y la calidad del empleo. Está previsto que a lo largo del verano se concreten los compromisos presupuestarios para estas materias en los próximos años, ha explicado Laparra.
El principio de acuerdo recoge medidas para reforzar la orientación integral a personas desempleadas o en mejora de empleo. Para mejorar el servicio, habrá un plan de formación para las y los técnicos del SNE-NL y de la red de entidades colaboradoras. Gobierno y agentes también coinciden en la necesidad de mejorar las condiciones de trabajo (entornos precarios, situaciones de desigualdad y discriminación); estimular la iniciativa empresarial y de sectores emergentes; reconocer al empresariado o el trabajo por cuenta propia como generador de puestos de trabajo; y reforzar la competitividad empresarial a través de la consolidación y crecimiento de empresas, sobre la base del empleo de calidad, el capital humano, la Responsabilidad Social, la internacionalización, perfiles estratégicos cualificados (gerentes o directores generales de pymes) o nuevos modelos de gestión.
El documento recoge un apartado innovador orientado a la garantía de la igualdad de trato y contra la discriminación en el empleo por cualquier circunstancia social o personal: etnia, lengua, sexo, orientación sexual, edad, ideología, religión y filiación política y sindical. También se refuerzan las medidas tendentes a reconocer la influencia de la Economía Social en el incremento del empleo (incorporación de socios, crecimiento empresarial, internacionalización, emprendimiento, formación, inserción laboral de colectivos (discapacidad, exclusión, empleo juvenil).
