Cuáles son las mayores barreras de acceso para los inversores minoristas hoy en día

El Foro Económico Mundial ha publicado un informe que analiza el futuro de los mercados de capital y la democratización de la inversión minorista. La investigación se basa en una encuesta realizada a más de 9000 encuestados en 9 países, así como la entrevista de expertos en el sector. En este informe destaca la importancia de mejorar el asesoramiento personalizado para los inversores minoristas, también se acentúan las oportunidades para mejorar la educación, la confianza y el acceso a los mercados de capital.

Con la actual volatilidad del mercado, es vital que los intermediarios garanticen que los beneficios de la inversión sean cada vez más accesibles.

Maxim Manturov, Jefe de Asesoramiento de Inversiones de Freedom Finance Europe, dice que: “Según un reciente estudio del Foro Económico Mundial, la mayor barrera de acceso para los inversores minoristas es la falta de conocimiento y educación sobre cómo invertir.

“Según el estudio, el 40% de las personas optan por no invertir porque no saben cómo hacerlo o lo consideran demasiado complicado. Además, alrededor del 70% de las personas son más propensas a invertir o a invertir más si tienen una educación financiera más extensa”.

“El estudio también sugiere que el aumento de la participación de los pequeños inversores en los mercados de capitales es en gran medida una tendencia positiva. Aunque persiste cierta preocupación por las inversiones de mayor riesgo, los inversores minoristas se muestran prudentes a la hora de utilizar los mercados para crear riqueza a largo plazo. Otras posibles barreras de acceso para los inversores minoristas podrían ser las condiciones del mercado, como la elevada volatilidad o la falta de opciones de inversión atractivas, ya que en esos momentos se manifiesta una mayor incertidumbre, lo que repercute negativamente en el sentimiento general”. Agregó Manturov.

Educación financiera es la clave

A medida que el mercado de inversión minorista madura y las plataformas crecen, tienen una responsabilidad aún mayor de garantizar que sus usuarios estén bien formados, incluso sean conscientes de los riesgos de la negociación y la inversión. Hay una serie de formas clave de promover la inversión responsable, como la educación financiera, la divulgación de información exhaustiva sobre los riesgos y la comunicación periódica con los inversores.

Con una avalancha de información financiera disponible en línea, es esencial que los inversores tengan acceso a una variedad de herramientas creíbles y gratuitas que les ayuden a aprender sobre los mercados financieros. Proporcionar información no es suficiente: el contenido debe ser adecuado para su propósito, con esfuerzos para que sea lo más comprensible posible. Un ejemplo para facilitar la introducción de nuevos usuarios a la inversión es la creación de cuentas de demostración, en las que se anima a los inversores a empezar utilizando un fondo virtual para conocer como comprar acciones y otros activos.

Por otro lado, ya que las redes sociales interactúan cada vez más con los mercados, anticipando o exacerbando los movimientos, es importante que los usuarios sean precavidos y lleven a cabo su propia investigación sobre determinados valores que han experimentado subidas meteóricas de precios. Además de educar a los usuarios para que consideren y definan su apetito por el riesgo, las plataformas deben comunicarse regularmente con sus usuarios sobre el riesgo, especialmente en productos de inversión muy volátiles, y animar a los usuarios a diversificar sus carteras.

Interfaz de operaciones intuitiva

A medida que aumente el número de participantes en el mercado, las plataformas de inversión tendrán que demostrar su capacidad para innovar y sacar al mercado nuevos productos impulsados por la tecnología.

En la última década, ha habido varios periodos de gran demanda de usuarios, el más reciente de los cuales fue el rally de las acciones meme en 2021. Las plataformas deben estar bien preparadas para manejar una crecida de la demanda, manteniendo la inversión en infraestructura y operaciones para seguir dando soporte a millones de transacciones por día en múltiples mercados y jurisdicciones regulatorias. Además, las aplicaciones deben mantener una funcionalidad que satisfaga los requisitos normativos regionales y las necesidades de los usuarios.