Los dos cargos de Ciudadanos en León imputados pedían 20.000 euros por sus gestiones para la trama 'Enredadera'

Los 'ciudadanos' en la Diputación de León, el diputado Juan Carlos Fernández, y su asesor Sadat Maraña, pidieron a los cabecillas de la trama Enredadera 20.000 euros por sus gestiones en la adjudicación semafórica de San Andrés del Rabanedo (León) un municipio de 35.000 habitantes gobernado por el PSOE. Este es el Ayuntamiento, de los 43 afectados por la investigación, con más imputados: seis. Entre ellos se encuentra su alcaldesa, María Eugenia Gancedo.

La situación política de este Consistorio es clave para entender el papel de los dos hombres del partido naranja. El PSOE tiene 6 concejales (dos de ellos investigados), el PP 5, IU tiene 4 ediles, Ciudadanos 3 (un investigado), UPL 2 y el Partido Autonomista Leonés-Unión Leonesa 1, también investigado. Así, Ciudadanos negocia permanentemente los apoyos.

Es en este escenario en el que tanto el concejal Juan Carlos Fernández, y su asesor en la Diputación de León, Sadat Maraña, se presentan ante el cabecilla de la trama, José Luis Ulibarri, y su socio, Ángel Luis García 'El Patatero', como los conseguidores, los únicos que pueden forzar a la alcaldesa a firmar un primer contrato semafórico que daría pie a un segundo de 600.000 euros.

El contrato, a favor de Gespol por su aplicación informática, se tenía que firmar sí o sí. Pero, mientras los dos de Ciudadanos se presentaban ante la trama como tiburones que forzarían a Gancedo a firmar porque necesitaban de ellos para aprobar su plan económico y financiero y otras gestiones, quien realmente ejercía presión sobre la regidora, según los informes de la Udef, era Ulibarri.

En las conversaciones pinchadas entre Ulibarri, El Patatero y el delegado de Gespol, Roberto Legazpi, se desprende que se dio el OK a la compra del programa de Gespol, que el concejal de Hacienda les pasaría el pliego y que podían “tirar adelante con el proyecto de contratación”. En todo este procedimiento era fundamental además, la colaboración de 'Chema' un técnico del Ayuntamiento de San Andrés y de Villaquilambre casado con la 'número dos' de este último consistorio, que sería el que redactase los pliegos en beneficio de Gespol. El plan era visitarle para indicarle cómo.

En realidad no era fácil, había reticencias por parte del interventor, pero Ulibarri aseguró a su socio en una conversación que si no lo firmaba él, lo haría la propia alcaldesa.

A pesar de que el trabajo de presión lo hace Ulibarri, los dos de Ciudadanos pretendían cobrar una mordida de 20.000 euros y además hacer esa misma operación en el Ayuntamiento de Villaquilambre. Pero precisamente esa ralentización de la firma de San Andrés, hizo desconfiar a 'El Patatero', al que tenían “negro”, y advirtió al delegado de Gespol, Roberto Legazpi en una conversación el 14 de septiembre de 2017 para que les diese “vaselina”:

[...]

- AL: (se ríe) El lunes no hay Pleno y no está en contratación, pero cómo son estos, es que yo me pongo enfermo, mira, me tienen negro, y yo creo que ya quieren pasar de mí porque ya los he calado y te van a empezar a llamar a ti, no pasa nada, que te llamen a ti.

- R: No, pero fantástico.

- AL: Escúchalos.

- R: Ángel.

- AL: Vaselina, vaselina.

- R: Poli bueno, poli malo, oye no cuéntame Sadat, a tu disposición, no si yo eso (se ríe), oye en cuanto esté firmado nos vamos de fiesta.

- AL: Al final te digo una cosa, al final es eh... aquí hay objetivos y por éxito.

- R: Claro, claro.

- AL: Y si hay éxito, hay, y, y si no, pues para casita todos.

- R: A mí, a mí me toca un poco los cojones que me digan que como estamos en Vilaquilambre que nos echan una mano, sabes, cuando en San Andrés del Rabanedo, que lo tienen en, en teoría de la mano, no son capaces de rematarlo, o sea, entonces...

- AL: ¿Y dónde te han dicho a ti que te echan una mano? ¿En?

- R: Cuando, cuando estuve con ellos (ininteligible) no hables para nada con ellos de Villaquilambre, yo no hable para nada, me han preguntado y dije yo no tengo ni idea (ininteligible)

- AL: (se ríe) Querían ellos hacer también lo de Villaquilambre.

- R: Claro, claro.

- AL: Están listos.

- R: Ellos me decían que me echaban una mano (ininteligible), que hablara contigo para echar porque, porque ellos podían echarnos una mano en Villaquilambre y dije mira...

- AL: Sí están listos.

- R: Claro yo le dije, mira es un tema que lleva Ángel y sabes que eso lo lleva Ángel y lo mueve él y yo no tengo , y yo sólo se que lo lleva muy bien, pero , pero no se más, eh digo entonces, háblalo con él y si él.

- AL: Ellos no han visto a Manolín (alcalde) ni en una foto.

- R: Que ya, si , aparte ya sabía que no, entonces, pero a mí lo que me toca los cojones es que me diga que me quiere echar una mano en Villaquilambre cuando no son capaces de cerrar algo tan chorra en San Andrés del Rabanedo, entonces, si, si esto que es una mierda no son capaces de rematarlo.

- AL: Que es donde tienen ellos, que es donde tienen ellos mano.

- R: ¿Dónde?

- AL: Que se supone que es donde tienen ellos mano, en San Andrés.

- R: Claro por eso te digo que...

- AL: Y no tienen nada.

- R: Pues nada el lunes, eh, hablamos.

- AL: Y pidiéndome en 20.000 euros antes de todo esto.

- R: Pues fíjate, pues, pues fíjate, están locos.

- AL: Es que, es que es que vamos...

- R: Están locos...

Maraña podría haber ido sacando dinero a la trama poco a poco. En una conversación el 24 de febrero de 2017, Ángel Luis le dice a su secretaria que va a ingresar 2.000 euros en la cuenta personal de Maraña porque no debe tener un duro. Tres días después vuelven a hablar por teléfono y él le pregunta a ella si Sadat Maraña le dio “lo suyo”.

'El Patatero' tenía además otro plan con Maraña, que su secretaria asumiese el cargo de coordinadora de Ciudadanos. Sadat Maraña, que tuvo que dimitir de su cargo de coordinador por haber falseado su currículum, planeaba una vuelta a la primera línea, con el apoyo de “Jose Luis” (Ulibarri).

EL DESMAYO DEL MARIDO DE LA ALCALDESA

El pasado 3 de julio, cuando los funcionarios de la Udef se acercaron hasta la vivienda de María Eugenia Gancedo para detenerla, abrió la puerta su marido. Los funcionarios dejaron tiempo para que ella se cambiase de ropa mientras esperaban en el descansillo. Un golpe seco y llamadas de auxilio les hicieron entrar en la vivienda. El marido se había desmayado sobre la mujer, que tuvo que ser atendida en un centro sanitario antes de ser traslada a comisaría. Aunque Gancedo negó haber sido detenida, en el sumario consta también su ficha policial.