Albares, sobre la inclusión de la migración en la hoja de ruta de la OTAN: “No se trata de que se vea de manera ofensiva contra nadie”
“No se trata de que se vea de manera ofensiva contra nadie”, ha sido la respuesta del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, a la pregunta de si incluir una alusión a la utilización de la migración como una amenaza para la OTAN en su nuevo concepto estratégico es una respuesta a situaciones como las vividas en Ceuta el pasado año, cuando Marruecos permitió la entrada de unas 10.000 personas en menos de dos días, o la crisis entre Turquía y Grecia, ambos miembros de la alianza atlántica.
Así se ha pronunciado el ministro en declaraciones a los periodistas al concluir la primera sesión de trabajo de la cumbre de la Alianza Atlántica que se celebra en Madrid y antes de asistir a una cena en la que se centrará la conversación en el flanco sur. En un coloquio junto al secretario de Estado de EEUU, Anthony Blinken, Albares había apuntado a la crisis que atravesaron Polonia y Bielorrusia: “Tenemos que abordar esas causas raíz y tenemos que cooperar. El coste del riesgo, como hemos visto en la frontera de Bielorrusia con Polonia, es que alguien pueda usar esto como arma contra nuestra integridad territorial o nuestra soberanía”.
Lo cuenta Irene Castro.