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Una empresa de bomberos privatizados exige que solo se informe de las incidencias a tres diarios y una radio

Imagen de la página web de Veycar en la que publicita su gestión de los parques de bomberos en Galicia.

José Precedo

La empresa Veicar que gestiona 14 parques comarcales de Galicia ha prohibido a todos sus efectivos, tanto bomberos como mandos, hacer declaraciones a los medios de comunicación. Así figura en un código interno remitido a la plantilla el pasado 10 de marzo por la dirección de esta firma, a la que el Gobierno gallego y las diputaciones provinciales de A Coruña, Lugo y Ourense le han adjudicado la gestión de las emergencias en catorce zonas de la comunidad.  

El protocolo de actuación remitido al personal de sus parques permite mandar comunicados de prensa “para informar a la población” en caso de intervenciones en sucesos graves pero la información solo se podrá enviar a cuatro medios de comunicación elegidos por ella y siempre con copia a los directivos de Veicar.

En las instrucciones remitidas a los bomberos de los parques de Verín, Valdeorras y A Limia se detalla cuáles son los correos electrónicos a los que se deben mandar los comunicados. Los medios elegidos son las ediciones locales de La Voz de Galicia, La Región, Faro de Vigo y una emisora de la cadena Cope, además de un par de portales web sin apenas audiencia. Para remitir información a otros medios, la empresa subraya que deberá solicitarse permiso a la dirección.

Las órdenes que los gestores de Veicar, con 220 bomberos en nómina, envió a sus efectivos y mandos explicitan que las notas de prensa “solo se realizarán en las intervenciones que tengan cierto nivel de gravedad o que puedan resultar notorias en la zona de influencia de los parques”. En ellas, “se podrá adjuntar o no algún documento gráfico siempre que este cumpla con todos los requisitos para ser enviado al exterior del parque”.

Los bomberos también reciben pautas por escrito de cómo ha de ser la redacción de esos comunicados que se remitirán a esos medios de comunicación elegidos: “No habrá ninguna muestra de subjetividad, ni se harán referencias a datos no probados, ni posibles causas hipotéticas, se mantendrá siempre una imagen de calma, y se evitará realizar comentarios que puedan crear discrepancias. Están expresamente prohibidas las manifestaciones ajenas a la intervención, de corte laboral o que puedan suponer una crítica al personal interviniente, los medios, los procedimientos o cualquier otra cuestión de corte interno del parque, empresa o Consorcio”.

El manual de relaciones con los medios de comunicación de Veicar apunta que la autoría de los comunicados de prensa compete a los jefes de servicio de cada parque comarcales aunque en su ausencia podrán informar los responsables de cada turno. El protocolo de Veicar termina con dos advertencias: “No se podrá realizar ninguna otra comunicación de carácter profesional a los medios, salvo que exista una comunicación expresa para ello por parte de la empresa. Cada quien es responsable únicamente de las notas de prensa que haya escrito”.

La circular detalla que esa normativa interna entró en vigor el mismo día en que fue remitida a la plantilla. No obstante, un portavoz oficial de Veicar apunta a eldiario.es que el protocolo “es un documento vivo y que ya se está negociando una nueva versión con los trabajadores”. Este miembro de la dirección señala que “la empresa jamás ha puesto trabas a los medios de comunicación”. “Se han aportado las direcciones correos de los que solicitan información habitualmente, pero esa lista es ampliable”, asegura a preguntas de este diario.

Veicar es una de las empresas que estuvo en el origen de la privatización de los bomberos de Galicia, donde solo los de las ciudades tienen la condición de funcionarios. La firma, que se reconvirtió y pasó de ser una carrocera de vehículos a la gestión de las emergencias a través de adjudicaciones de diferentes Gobiernos gallegos desde la época en que Manuel Fraga era presidente, emplea a 220 bomberos bajo un modelo de gestión único en España a través de subcontratas que dependen de los consorcios provinciales que financian al 50% el Gobierno gallego y cada una de las cuatro diputaciones. 

El sistema está amparado por la polémica Lei de Emerxencias de Galicia, contra la que se han manifestado reiteradamente los bomberos de los parques públicos y privados para conseguir que el Gobierno de Alberto Núñez Feijóo revierta el modelo. Las fuentes internas consultadas sostienen que el protocolo de la comunicación de la compañía trata de establecer un férreo control de la comunicación y establecer sanciones para evitar que los bomberos se pronuncien contra la privatización del servicio.

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