Los policías que revisaron el caso Faisán dicen que no guardan copia de su informe

Dos agentes que pertenecieron a la conocida como 'policía política' ha comparecido este lunes en la Audiencia Nacional para dar explicaciones por el informe del 'caso Faisán'. Ante el juez José de la Mata han reiterado la versión que ofreció el Ministerio del Interior cuando el ex director adjunto operativo (DAO) Eugenio Pino reveló la existencia de ese documento: no hay copias digitales y no tienen en su poder ninguna física.

El juez trata de conseguir ese documento, de cuya existencia habló Pino en una entrevista con El Mundo. Por ello había citado como testigos a la agente Nuria Mazo, que estuvo a cargo de la Brigada de Revisión y Análisis de Casos (BARC), y a dos agentes a su servicio que habrían elaborado el documento tras investigar el chivatazo del 'caso Faisán'. Uno de ellos no se ha presentado ante el juez porque está destinado en el extranjero.

Según fuentes presentes en la declaración, los dos agentes han reconocido la existencia de ese informe, pero han indicado que no conservan ninguna copia de él, ni física ni digital. Han insistido en que solo existen tres copias en papel: dos en manos de Pino y otra en poder del comisario Marcelino Martín Blas.

Es la misma versión que la Dirección General de la Policía le dio al juez cuando les pidió el informe para revisarlo. Según Interior, Pino ordenó borrar todas las copias de ese documento de 100 páginas que analiza el chivatazo a la red de extorsión de ETA que tenía como base el bar Faisán de Irún.

El Ministerio argumenta que no puede recuperar esas copias porque Pino ya está jubilado y Martín Blas se encuentra en comisión de servicios en el caso sobre el 'pequeño Nicolás'. Ambos comisarios están enfrentados después de haber trabajado juntos en busca de información contra políticos independentistas y miembros de Podemos.

Ante el juez, los agentes no han hablado sobre el contenido de ese informe, porque el magistrado solo les ha preguntado si conservaban una copia, según las mismas fuentes. Su existencia se conoció después de que Pino dijese en una entrevista que la brigada de agentes que dirigió se dedicó a investigar de nuevo casos ya cerrados como el 11M o el Faisán. El del 11M ya fue analizado y despreciado por la Audiencia Nacional por no contener información novedosa.

El mismo juez que ha interrogado a los agentes ordenó hace unos días que se deduzca testimonio contra Pino por el contenido de la declaración que prestó ante él en relación con el sospechoso origen de un pen drive incorporado por la Policía a la investigación contra los Pujol. De la Mata cree que Pino y su exjefe de gabinete Bonifacio Díez Sevillano podrían haber incurrido en delitos de “prevaricación y/o falso testimonio o fraude procesal, sin perjuicio de ulterior calificación”.