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La empresa familiar pide “una solución política estable cuanto antes” para España

Toledo acoge el Congreso Nacional de la Empresa Familiar

Carmen Bachiller

 “España necesita una solución política estable cuanto antes”. La frase la pronunciaba el presidente del Instituto de la Empresa Familiar (IEF) que celebra su Congreso nacional en Toledo desde ayer y hasta este martes.  Ignacio Osborne dedicaba parte de su discurso, durante la inauguración oficial del Congreso, a la situación que vive Catalunya para asegurar que “la Constitución es hoy, después de 40 años, el mayor símbolo de convivencia en nuestro país”.

“La incertidumbre es el peor enemigo del desarrollo económico”, recordaba, para instar a los partidos políticos a “buscar consensos y amplios acuerdos políticos en aquellas cuestiones de especial interés para el país”. A ellos, a los políticos, se refería Osborne al asegurar que “se trata de una cuestión de voluntad” y ponía de ejemplo a las propias empresas familiares, acostumbradas, decía, a convivir con el adjetivo “difícil” para concluir con un “no nos gusta la gente que se excusa con otro adjetivo: imposible”.

Catalunya se ha colado en este Congreso nacional que aprovecha para celebrar el 25 aniversario de la fundación del IEF, al que ha disculpado su asistencia Felipe VI precisamente por la situación catalana y este mismo lunes se ha conocido que tampoco Mariano Rajoy clausurará mañana el evento.

Más del 80% de empresarios familiares, optimistas con la economía

Es la primera vez que Toledo acoge el encuentro nacional de la empresa familiar española que concentra a 500 asistentes y en el que participan empresarios  como  Howard Schultz, presidente de Starbucks,  Plácido Arango, presidente del Grupo Vips o Alexandre Ricard, presidente de Pernod Ricard o la ex ministra socialista Cristina Garmendia, actual presidenta de la Fundación Cotec, entre otros.

Durante el Congreso se ha presentado la Encuesta Interactiva sobre el contexto económico y empresarial realizada por el Instituto de la Empresa Familiar en la que este colectivo empresarial califica con un 6,2 sobre 9 la situación económica actual en nuestro país y un 82% de los encuestados sostiene que a corto y medio plazo se producirá un moderado aumento de la actividad con una limitada creación neta de empleo.

De cara a 2018, el 73% de las empresas familiares esperan un aumento en su cifra de ventas, el 52% se plantea aumentar su plantilla y un 78% aumentará su inversión en España. “Son los resultados más optimistas” desde que se  viene realizando este estudio (2013), comentaba Hilario Albarracín, presidente de KPMG en España quien ha asegurado durante el acto de inauguración del congreso que “España uno de los tres países del mundo más atractivos para invertir en 2017” aunque ha pedido reformas estructurales “con amplios consensos”, que potencien la inversión tecnológica y la innovación, además de medidas que favorezcan el aumento del tamaño de las pymes.

“En España necesitamos un debate profundo sobre el crecimiento empresarial” que esté basado no solo en la experiencia de los empresarios sino que cuente con la “participación” del resto de agentes sociales. Ha calificado de “asignatura pendiente” configurar un “modelo económico sostenible, más productivo, eficiente e innovador”.

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