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Escolares valencianos que van a clase andando seguros y rápidos

Participantes del proyecto Cien Pies de educación vial.

Isaac Altable

Los emprendedores sociales tienen un motor principal que es servir de palanca para cambiar el entorno. Para evolucionarlo. Para mejorarlo. Además, como estamos viendo en la acumulación de experiencias que aparecen en Inspira, la posibilidad de convertir esa herramienta en una actividad rentable y, por lo tanto, sostenible en el tiempo es pieza crucial. Dota a las iniciativas de independencia, longevidad, utilidad... Con ese ánimo nace Cien Pies.

Cien Pies es un “proyecto social e mejora del entorno que ofrece un servicios de transporte”. La descripición es suya. Pero ¿en qué consiste? Pues en permitir que los niños y niñas acudan al colegio de una manera cómoda, sencilla y respestuosa con el medio ambiente: a pie. Los escolares van acompañaos de guías y voluntarios para que el camino sea seguro y supervisado. Sostenible, rápido, rentable... El proyecto está radicado en las localidades valencianas de Rocafort y Godella.

La dinámica es tener unas rutas para unir los barrios con los colegios de las localides. Desde diferentes zonas de las localidades y de puntos donde organizar los grupos se acude andando a los centos escolares. Con una suscripición, los pequeños y pequeñas se unen al ciempiés de Cien Pies. Y ¿por que hacer esto? Se preguntarán algunos. “Porque es más seguro que ir en coche y es más beneficioso para su educación. Porque es más divertido, más barato, más sano, más ecológico, y más cívico”, responde desde el proyecto. Y no para si hace mal tiempo tan sólo “se aprende a cómo vestirse si llueve”. Y se adapta a los horarios de los colegios a los que se asocia cada ruta.

Cien Pies funciona como un servicio con sus tarifas, sus tarjetas de usuarios... Cada hilera de escolares tendrá sus guías duchos en educación vial e infantil. Sus promotores aseguran que es la manera más “rápida, puntual y barata de ir al colegio los menores”. Entre las baterías de ventajas que manejan para convencer a los vecinos de estas ciudades valencianas está la contribución a un entorno más saludable y descontaminado, reducción del gasto en el transporte con motor y la seguridad de que los niños y niñas van y regresan a su hora del colegio. Además, se promueve más el ejercicio físico de los escolares (luchando contra el sedentarismo) y su educación cívica.

Lógicamente, se trata de un proyecto de proximidad. Pero, si se piensa en un salto a mayores ciudades, la cosa sería trabajar en el entorno del barrio y sus centros educativos. Cien Pies es una idea del Laboratorio de Transporte Sostenible.

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