El Gobierno rectifica e incluye a Málaga en el plan contra los robos en el campo
El Gobierno ha dado marcha atrás y diez guardias civiles operan desde el 1 de octubre en la provincia de Málaga, desplegados como parte del plan especial para combatir los robos en las explotaciones agrícolas. La delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, se ha reunido este jueves con representantes de las principales organizaciones agrícolas de la provincia, y ha realizado el anuncio de rectificación. El encuentro ha servido para aplacar los ánimos de las organizaciones agrarias provinciales, que desde que conocieron el plan anunciado por el Gobierno el pasado 25 de septiembre habían exigido su modificación.
Se trataba de calmar las aguas y de explicar a los enviados de las organizaciones agrarias los motivos de lo que muchos habían interpretado como un agravio injustificado. Las asociaciones vienen denunciando desde hace meses el repunte de los robos en las explotaciones y, sin embargo, ninguno de los 275 guardias civiles que en principio iban a reforzar la lucha contra este tipo de delitos había sido destinado a Málaga. Así que Crespo ha comparecido ante los medios y ha anunciado que sí, que finalmente cinco nuevos guardias civiles serán destinados inicialmente a la zona de Antequera y otros cinco a la comarca del Guadalhorce. En la Axarquía, que no ha sido incluida en el plan, patrulla desde hace una semana un helicóptero.
Santiago Sánchez, técnico de ASAJA, explica que sólo se darán por satisfechos cuando deje de haber robos, pero que agradece la entrada de Málaga en el plan ROCA (de Robos en el Campo): “Tenemos que esperar a ver el efecto, pero es una noticia positiva”. Sánchez admite que la presentación del plan la semana pasado supuso una decepción, y que el inicio de la campaña del mango y el aguacate en la Axarquía había coincidido con un repunte de los robos en la zona. La vigilancia aérea ha disminuido la incidencia y, paralelamente a la llegada de los refuerzos se realizará una zonificación y reuniones comarcales que permitan desplazar los efectivos allá donde sean más necesarios.
Jorge Fernández Díaz, ministro de Interior, y Miguel Arias Cañete, de Agricultura, presentaron a los nuevos equipos ROCA el pasado 25 de septiembre, con el fin de “atajar el fortísimo agravamiento” de este tipo de delito. 275 guardias civiles, integrados en 55 equipos se repartirán en 15 provincias (entre ellas Huelva, Sevilla, Granada, Córdoba y Almería). Sin embargo, el reparto provocó que algunos territorios se sintieran discriminados. Ayer mismo, el secretario general del PSOE en Málaga, Miguel Ángel Heredia, solicitó al Gobierno una “rectificación” y la inclusión de la provincia en el nuevo plan, y aseguró que los robos con violencia (entre los que se incluyen los robos en el campo) aumentaron el 25% durante el último año en Málaga. “En las comarcas de la Axarquía, Antequera y Guadalhorce se ha producido un repunte importante de estos delitos pero Rajoy sigue ninguneando al campo malagueño”, lamentó Heredia, citado por Europa Press.
Sus declaraciones incidieron en la respuesta institucional de la Junta de Andalucía del pasado domingo. Javier Carnero, delegado de Agricultura de la Junta de Andalucía en Málaga, lamentó el reparto de efectivos en un comunicado y dijo no entender los criterios del ejecutivo para elegir las provincias en las que se reforzará la lucha contra los robos. Además, Carnero advirtió de un posible “efecto llamada” de los ladrones hacia las zonas menos vigiladas.
